El descenso de las temperaturas y el incremento de la humedad ha favorecido la aparición de la mosca del olivo, tal y como advierten desde la Red de Alerta e Información Fitosanitaria (RAIF).
Se encuentran en todo el territorio español, especialmente en zonas rurales y boscosas, donde encuentran sus hospedadores naturales, como mamíferos y aves.
No solo tienen un impacto devastador en la salud de las personas, sino que también representan una carga económica significativa para los sistemas de salud.