Las últimas lluvias y la bajada del consumo anticipan un leve respiro para el bolsillo de los consumidores, pero la incertidumbre sigue marcando al sector productor.
Las primeras cosechas empiezan a llegar al mercado y los consumidores ya esperan que el aumento de producto en las bodegas de las almazaras se traduzca en rebajas.
El aumento de los precios se moderó en septiembre en los servicios, que siguieron registrando la inflación más alta entre los componentes de la cesta de la compra.