Felipe de Borbón, el Preparado
Treinta y tres años y cientos de discursos después de su pimera intervención en público, Felipe de Borbón tiene tablas. Sereno, imperturbable, se coloca erguido tras su atril, con teleprompter, móvil o papeles para leer, y lee. Lee correctamente unos discursos bien escritos, con frases bien estructuradas.