Nacidas sin brazos y sin piernas por este medicamento, olvidadas durante décadas, por fin serán reconocidas unas 130 personas. Con un 33% de discapacidad, por ejemplo, recibirán 396.000 euros, según el Ministerio de Derechos Sociales.
El caso de la Hepatitis C y el precio desorbitado de sus tratamientos ha puesto de manifiesto un problema que nos afecta a todos. Estos precios tan altos y la falta de investigación para enfermedades no rentables iluminan el problema sistémico más grave al que nos enfrentamos: un sistema de innovación roto en el que la investigación está guiada por intereses empresariales y no por el derecho a la salud y el interés público.
El pasado año, Barhuze estaba trabajando al lado del río de su pequeña aldea cuando le picó, sin darse apenas cuenta, una mosca tse-tse, transmisora del parásito de la enfermedad del sueño. Este joven pescador no prestó demasiada atención a la fiebre ni al dolor. Pensó que sería gripe.