La Comisión Europea siempre ha defendido una forma de regulación basada en el miedo de las empresas a perder su reputación: "Name and Shame". ¿Por qué no aplicar más este principio a la cuestión de la transparencia fiscal? El 12 de abril de 2016, el comisario europeo Pierre Moscovici, encargado de las negociaciones, anunciará qué datos se harán públicos en todos los países europeos.