Se estrenaba este año, pesa un 30% menos con respecto a la anterior estructura y se ha hecho con fibra de carbono y aluminio aeronáutico, pero no ha aguantado.
Visual y conceptualmente, es un caso de maltrato animal mucho más sutil que los pocos que saltan a los medios de comunicación mainstream, como el comúnmente aceptado espectáculo de las corridas de toros o sus variantes locales como el del Toro de La Vega, ese controvertido y polémico evento. Léase con ironía.