Es incomprensible a estas alturas de la historia que Ana María Tejeiro, casada con Diego Torres, socio de Iñaki Urdangarín en el caso Nóos, esté imputada desde 2011 por blanqueo de capitales, mientras la infanta Cristina sólo está imputada de delito fiscal, con la más que posible escapatoria incluso de sentarse ene el banquillo.