Sin Chus, como vaca sin cencerro
La suegra de Carmen Maura en Qué he hecho yo para merecer esto o la madre de Marisa Paredes en La flor de mi secreto podrían ser objeto de todo un análisis de género porque en ellos Almodóvar supo condensar un modelo de mujer, tan de nuestro país, heredero de la oscuridad de la que veníamos y poseedor de tantas virtudes construidas sobre la renuncia. Un modelo de mujer que fue agrietando con sabiduría, y dentro de sus limitaciones, el trono del patriarca.