¿Puedes cobrar el paro si te toca la Lotería de Navidad?
Una pregunta que no pocos españoles se han hecho en algún momento de su vida.
Un total de 2.586.018 personas se encuentran en situación de desempleo en nuestro país, según los datos del mes de noviembre de 2024. Y seguro que más de uno está cruzando los dedos para que el próximo 22 de diciembre su décimo sea agraciado en el Sorteo de la Lotería de Navidad.
Pero hay que tener en cuenta que algunos premios son incompatibles con ciertas ayudas del estado, puesto que uno de los requisitos en algunos casos es no recibir ningún otro ingreso. Pero todo depende del tipo de prestación, así que hay que ir caso por caso.
Como informa Onda Cero, las personas que actualmente están cobrando el paro (prestación contributiva por desempleo) podrán seguir manteniendo la ayuda aunque les toque la lotería. Y esto es así porque no se establece ningún límite de ingresos mensuales dentro de los requisitos debido a que puede recibirlo cualquier persona que haya cotizado más de un año.
Sin embargo, quien esté cobrando un subsidio por desempleo sí que podría verse afectado tras recibir un premio de la lotería de Navidad. En este caso, la ayuda sí que incluye un requisito fundamental: no se puede tener una renta que supere el 75% del Salario Mínimo Interprofesional (1.080 euros brutos mensuales).
Esto quiere decir que todas las personas que tengan ingresos superiores a los 750 euros al mes no pueden percibir esta ayuda. Aunque la suspensión tiene carácter temporal, por lo que el siguiente mes podrá volver a solicitarse al no recibir más cobros de la lotería.
Lo mismo sucede con el IMV, cuyos beneficiarios no pueden ingresar más rentas de las establecidas por la Seguridad Social. Pero, como sucede con el subsidio por desempleo, la suspensión de esta ayuda tendría carácter temporal por haber recibido un premio. Y el mes siguiente podría solicitarse de nuevo.
Pero hay que tener en cuenta un punto fundamental: hay que notificar a la Seguridad Social que se ha ganado un premio de la lotería en un plazo de 30 días desde el momento en que se ingresa en el banco. Si no se hiciese este proceso, podría ser sancionado económicamente.