Uno de los campings más originales del mundo aguarda en el corazón de una isla paradisiaca muy cerca de España
El motivo no es otro que el lugar en el que se encuentra.
Portugal, en sus más de 90.000 kilómetros cuadrados, esconde multitud de rincones dignos de postal. Desde su capital, Lisboa, a otras ciudades grandes, así como sus pueblos o sus playas. El Algarve, por ejemplo, nada tiene que envidiar a otros rincones paradisíacos propios de América del Sur.
Es precisamente en esta zona en la que, a unos 15 minutos en barco desde Olhao, se encuentra la isla de Armona. Localizada en la Ría Formosa, puede presumir de ser uno de los pocos puntos turísticos que quedan en el que apenas hay coches.
Además, las playas de esta isla ofrecen unas espectaculares vistas caracterizadas por los extensos arenales de color blanco y unas aguas de un azul envidiable. Con casitas pequeñas a lo largo de sus calles y muy pocos bares y restaurantes, pasar el día en la playa se torna uno de los planes más comunes en Armona.
Además, sus costas no están excesivamente masificadas, según recogen varios blogs de viajes que han dedicado un espacio para esta isla. Esta, además, para estancias más prolongadas, acoge un camping de lo más particular.
El motivo es el lugar en el que se encuentra: un parque natural. A unos 200 metros de la playa, ofrece alojamientos equipados con WiFi y la instalación pertinente para hacer una —o las que sean— barbacoa, además de un área de juegos para los más pequeños de la casa.
Asimismo, durante la estancia en la isla, se pueden llevar a cabo multitud de actividades. O así lo recogen desde la página web del camping. Todas ellas acuáticas. Algunas de las que detallan son montar en barco, en canoa, hacer windsurg, vela, buceo o surf, entre otras tantas.
