Los 8 países con joyas escondidas en Europa del Este

Cuando se habla de Europa, todo el mundo suele pensar en los mismo países y ciudades: España, Francia, Alemania, Países Bajos, Italia o Bélgica. Pero la realidad es que, aunque es el continente más pequeño con diferencia, cuenta con numerosos lugares desconocidos para muchos y que se encuentran añejados de la Europa Occidental con la que generalmente asociamos al Viejo Continente.

Es por ello que no está de más, que se recuerde, de vez en cuando, que Europa también cuenta con otra cara, alejada del glamour de París, las costas españolas o italianas, o los Alpes suizos. Es entonces cuando descubrimos que en el este de Europa, se encuentran numerosos países, que cuentan con lugares secretos de los que quizá, nunca hayamos oído hablar.

Y es que, aunque es cierto que en las últimas dos décadas -sobre todo desde la llegada de la UE-, se ha facilitado mucho el poder viajar y conocer países y zonas europeas antes desconocidas por falta de atractivo o incapacidad de ir para los europeos occidentales medios, actualmente es una región muy transitada y visitada por ciudadanos de la Europa occidental.

En este sentido y para conocer un poco más está increíble región, les mostraremos determinados lugares de obligada visita si se acude a alguno de estos países.

1. Macedonia del Norte

En primer lugar, nos trasladamos al norte de la histórica Macedonia, que hasta 1991 formó parte de Yugoslavia. Se trata de un lugar ubicado en el sudeste europeo con capital en Skopje y en el que a lo largo y ancho de la ciudad, se puede disfrutar de numerosos lugares en honor a Alejandro Magno. Pero no solo eso.

En este país se encuentran dos sitios a los que hay que ir sin falta: el cañón de Matka, el cual se puede descubrir mediante un crucero por el río Treska, en el cual también podrá disfrutar de las cuevas de Vrelo, a donde solo se puede llegar vía marítima.

Otro lugar interesante para ver sería el lago Ohrid, ubicado en el pueblo con su mismo nombre y en el que hay una iglesia ortodoxa, San Juan Kaneo, con un mirador ideal en el que poder hacer las mejores fotos del lugar.

2. Bulgaria

En Bulgaria, con capital en Sofía, se puede disfrutar de increíbles e históricos monumentos, así como lugares naturales como ríos, lagos, bosques... que cuentan con historias de lo más increíbles. 

Como ejemplo estaría la ciudad de Plovdiv o el Monasterio de Rila, donde disfrutar de un entorno espectacular. Además, Bulgaria es, en cuanto a número, el segundo país europeo con más manantiales, donde se puede disfrutar de vistas espectaculares y zonas de lo más interesantes.

3. Albania

Si hablamos de Albania, cuya capital es Tirana, hablamos de un país pequeño, al este de Italia y que hace frontera con Grecia, Macedonia del Norte, Kosovo y Montenegro, y cuyo oeste está bañado por las aguas del mar Adriático, que dan un color y una imagen inigualable a sus playas.

Son precisamente sus costas las que hacen de este país, de poco más de dos millones de habitantes, un enclave único, con puestas de sol espectaculares y aguas cristalinas que dotan al lugar de una imagen única. Entre sus principales ciudades destacan Kakome, Kroreza, Gjipe o Ksamil.

4. Serbia

Si hablamos de Serbia, lo hacemos de uno de los países con mayor historia de Europa. Durante años fue el corazón de Yugoslavia junto a Croacia con la que, tras su caída, mantiene una rivalidad y una relación más que tensa.

Pero si nos centramos en los lugares a visitar en el país, desconocidos para muchos, tendríamos la fortaleza Kalemegdan, en la capital, Belgrado. Se trata de un edificio que representa a la perfección el estilo y arte arquitectónico del país, con unas dimensiones descomunales .

Junto a este, también encontramos una de las mayores presas del mundo, llamada La Puerta de Hierro y que controla el cauce del río Danubio. Se halla en el Parque Nacional de Djerdap.

5. Moldavia

En el quinto lugar tenemos a Moldavia. Siendo el país menos visitado de toda Europa, cuenta con increíbles parajes de lo más interesante. Por ejemplo, encontramos edificios que presentan una mezcla entre diversos estilos: el romano y el soviético. Con capital en Chisináu, los turistas pueden disfrutar andando por lugares como el parque Varea Morilor o el Arco del Triunfo.

6. Montenegro

Si hablamos de Montenegro, lo hacemos de riqueza natural y cultural: monumentos, montañas, playas, etc. Con capital en Podgorica, se trata de un lugar con innumerables zonas de lo más interesantes, como es el caso de Kotor, un tesoro escondido en el país, y conocido como la Joya de los Balcanes. Se trata de un lugar que a muchos les recordará a Dubrovnik.

Pero no solo eso, en Montenegro también se puede disfrutar de enromes espacios naturales, en los que disfrutar de grandes paisajes y una naturaleza autóctona e inigualable, como el Parque Nacioanl de Durmitor o el lago Skadar, siendo este el lugar donde mayor cantidad de agua dulce se concentra mayor cantidad de agua dulce de los Balcanes.

7. Bosnia

El siguiente lugar que hay que visitar es Bosnia. Con capital en Sarajevo, icónico e histórico enclave, donde se germinó la I Guerra Mundial tras el asesinato del archiduque Francisco Fernando.

La ciudad se podría definir como una mezcla entre las tradiciones austrohúngaras y las turcas, que pueden retrotraer a los turistas a tiempos pretéritos. Destacan además, la ciudad de Mostar o el pequeño pueblecito ubicado entre vegetación y montañas, Pocitelj. Por último, tendríamos el Parque Natural de Una, Blagaj Tekijay Buna Spring.

8. Rumanía

En último lugar nos encontraríamos con un país con el que España tiene muchos lazos: Rumanía. Pese a que es uno de los lugares del este más visitados por los turistas y un destino elegido por numerosas personas de Europa, también tiene lugares secretos o desconocidos por muchos.

Entre ellos se encuentran algunos monumentos históricos como El Parlamento de Bucarest -su capital-, las Iglesias de Madera en Maramures o castillos como el de Bran o Peles. Además, entre su riquísima cultura, también destacan los conocidos Monasterios Pintados localizados en Bucovina. 

Y cómo no, no podíamos olvidarnos de una de las zonas de Rumanía más conocidas del mundo: Transilvania, en los montes Cárpatos y lugar de residencia de Drácula. Sin duda, un país al que acudir y disfrutar de sus paisajes y gastronomía.