La única montaña que crece con la lluvia es española y puedes visitar sus minas blancas
Una curiosidad geológica que merece una excursión.
Cardona, en Barcelona, alberga una curiosidad geológica y un lugar único en el mundo: su Montaña de Sal.
Fue una de las minas de sal potásica más importantes del mundo, Mina Nieves de Cardona, que se explotó de 1929 a 1990).
"Hoy, el viejo recinto minero es el Parque Cultural de la Montaña de Sal, un gran equipamiento cultural que pretende divulgar la importancia de la sal, la excepcionalidad geológica del yacimiento y el aprovechamiento que el hombre ha hecho durante siglos", explican en la web de Turismo de la localidad.
Lo más llamativo, quizá, es que la montaña "hoy todavía crece a medida que la lluvia la erosiona", afirman desde la mencionada página, debido a sedimentos que se depositan de manera vertical.
Además, "sus 120 metros son tan sólo la punta de un enorme diapiro de cerca de dos quilómetros de profundidad"
En la actualidad, se pueden realizar dos tipos de visita, una guiada y otra, pensada para familias, teatralizada.