La ruta europea definitiva que te lleva por el rincón de los 1.500 castillos
Con impresionantes edificaciones y fortalezas llenas de historia.
El río Escalda, situado entre Gantes y Amberes, es todo un paraíso para los amantes de la historia y la arquitectura, ya que cuenta con una impresionante cantidad de castillos que acompañan su curso. Un total de 1.500 fortalezas para visitar, cada una con su propio legado, características y dimensiones. Estas edificaciones salpican el verde paisaje de parques, jardines y las áreas naturales del Riverpark Scheldevallei.
Este río fluye desde el norte de Francia, pasa por Bélgica y desemboca en el mar del Norte, en territorio de los Países Bajos. Se trata de una ruta que te lleva por una mezcla de paisajes naturales y arquitectónicos impresionantes, desde antiguas fortalezas medievales hasta elegantes castillos renacentistas. Además, la región también está repleta de pequeñas iglesias góticas, abadías y otras construcciones históricas.
En resumen, seguir la ruta del río Escalda es como viajar por un libro de cuentos lleno de castillos y paisajes medievales. A continuación, te hablamos de algunas de las edificaciones más populares:
1. Castillo de Laarne
Se trata de uno de los castillos mejor conservados de Bélgica, ubicado a quince minutos de Gante. Se comenzó a construir hace más de 700 años, pero con el paso del tiempo ha pasado por varios procesos de restauración y ampliación, hasta que en el siglo XVII se convirtió en una noble residencia de verano adquiriendo la forma actual. Consta de un estilo arquitectónico gótico en su mayoría, aunque tiene algunas modificaciones con ciertos toques renacentistas.
Rodeado por un foso, el castillo es famoso por su excepcional mobiliario, con numerosos tapices flamencos, muebles antiguos, pinturas y hasta una colección de plata de renombre internacional. Actualmente, está abierto al público y es un destino idóneo para visitar en familia, que cuenta hasta con gnomos ocultos para que los más pequeños se entretengan buscándolos.
2. Gravensteen
Este lugar tan emblemático, también conocido como la ‘Castillo de los Condes’, es una icónica fortaleza medieval situada en el corazón de Gante, en Bélgica. Se trata del único castillo con foso que queda en Flandes con una fortificación intacta. Su historia se remonta a la época romana cuando, tras el paso de unos vikingos, los Condes de Flandes decidieron reformar la gran mayoría de construcciones de madera de la zona y erigir una torre del homenaje rodeada de un muro de piedra.
A finales del siglo XVIII se decidió venderlo a particulares y pasó a convertirse en un complejo industrial de manufactura textil. Posteriormente, a principios del siglo XX, volvió a ser uno de los lugares de mayor interés de Gante gracias a sus impresionantes dimensiones y su arquitectura románico-gótica.
3. Castillo d’Ursel
Una elegante residencia señorial, con una combinación de influencias renacentistas y neoclásicas, que durante cuatro siglos perteneció a la familia noble d’Ursel. Construido en el siglo XVIII, este castillo ubicado en Hingene alberga en su interior senderos, elementos acuáticos y hasta prados para tomar un picnic mientras se disfrutan de las vistas. Actualmente, tanto el castillo como el parque pertenecen a la provincia de Amberes, desde donde lo han restaurado.
4. Castillo Marnix de Sainte Aldegonde
Un viejo castillo que ha sido propiedad de importantes familias con el paso de los siglos. En 1586, Pedro Coloma compró el castillo neogótico de Bornem, reconstruyendo las ruinas y construyendo la abadía del lugar. Posteriormente, a finales del siglo XVII, Jean François Coloma, nieto del antiguo propietario, fue nombrado primer conde por el rey Felipe IV. En la actualidad, el castillo pertenece al Conde John II de Marnix, cuya familia ha tenido la propiedad desde 1773.
Este castillo destaca por su hermosa ubicación a orillas del río Escalda (Scheldt en neerlandés), rodeado de extensos jardines y bosques, así como del leve caudal del agua. Su interior conserva todavía parte del mobiliario y arte de época que reflejan la historia de las distintas familias que han pasado por ahí.
5. Het Steen
Uno de los castillos más antiguos de Amberes, tanto que incluye parte de la muralla más antigua de la ciudad. Sus primeras piedras datan del siglo XI, aunque gran parte de lo que queda hoy en día es de una reconstrucción del siglo XIII. A lo largo de los siglos ha cumplido muchas funciones y cambiado de forma. Originalmente fue concebido como una fortaleza defensiva, ahora Het Steen es un centro de visitantes donde se puede conocer más sobre la historia de la ciudad, sus barrios, museos y personajes célebres.
