La prensa británica alaba la última medida de España con sus islas paradisíacas
En verano, pueden visitar las islas 1.800 visitantes al día.
Si algo ha puesto sobre la mesa este 2024 es que muchas zonas de España han dicho basta ante el turismo masivo. Las protestas en Canarias, Baleares, Barcelona y ciudades andaluzas como Sevilla, Málaga o Cádiz han mostrado el hartazgo de la población local ante la turistificación de las ciudades y las consecuencias que esto tiene a nivel de vivienda o empleo.
Ante esto, The Guardian se ha querido fijar en un enclave paradisiaco que ha hecho frente al turismo de masas mucho antes que todas estas ciudades: las Islas Cíes. Este archipiélago ubicado en la ría de Vigo, en Pontevedra, cuenta con la protección de Parque Nacional desde 2002 formando parte del Parque Nacional Marítimo-Terrestre de las Islas Atlánticas de Galicia.
En la prensa británica, donde destacan especialmente la biodiversidad de la fauna y la flora de las islas, alaban la medida de limitación de visitantes impuesta desde 2017. Por ella se establece que desde el 15 de mayo hasta el 15 de septiembre, pueden visitar las islas 1.800 visitantes al día, y fuera de esas fechas el aforo se reduce a 450.
Para poder acceder, cada visitante debe obtener en la web del gobierno regional un código QR y pagar 25 euros por el viaje en ferry de ida y vuelta a las islas.
"Se trata de conservarlas para que la gente pueda disfrutarlas, y el turismo debe estar muy centrado en la defensa y protección del mundo natural que constituye la base de su negocio", explica a The Guardian el director del parque, José Antonio Fernández Bouzas.
En el artículo recalcan que esta solución no es posible, por ejemplo, en ciudades u otro tipo de destinos turísticos que no se ubiquen como parque natural, ya que tal y como apunta Claudio Milano, investigador del departamento de Antropología Social de la Universidad de Barcelona, "las ciudades se convertirían en un parque temático".
"Lo que tenemos en las Islas Cíes, en Machu Picchu y en estos grandes parques nacionales es algo que funciona en los parques, donde necesitamos un aforo prudente debido al medio ambiente", recalca Milano en el artículo.
Es por eso, que desde la prensa británica alaban esta medida de protección del entorno que, en el caso de las ciudades, pasaría por proteger también a sus ciudadanos con políticas de empleo que acaben con la precariedad del sector turístico o de vivienda, por ejemplo, limitando los apartamentos turísticos.