La isla española que ha conseguido un maridaje perfecto entre el vino y el alto diseño
La prensa especializada destaca la "palpable nueva veta de imaginación entre los residentes".
De sus encantos pueden dar buena nota sus vecinos, pero también los miles y miles de viajeros que se desplazan en busca de sus muchos atractivos. Se trata de Lanzarote, una de las islas del archipiélago canario y un referente turístico en España y más allá.
Sus paisajes volcánicos, de viñedos y espacios naturales de todo tipo han llenado titulares y reportajes de la prensa internacional dese hace años. El legado y la mano de César Manrique han sido claves para buena parte de ese impulso.
Pero ahora "la isla ha salido de la sombra de Manrique y ha comenzado a crear algo respetuosamente nuevo", como recoge el medio especializado en viajes CNTraveler, que se hace eco de la aparición de locales, negocios y espacios, a caballo entre los mundos del vino y el alto diseño.
"Ha surgido una nueva generación de atractivos alojamientos a pequeña escala, principalmente en las zonas rústicas del interior de la isla", prosigue la publicación, destacando una "palpable nueva veta de imaginación entre los residentes".
El redactor del artículo destaca que en una reciente visita a Lanzarote "todavía nos impactaba esa asombrosa y despejada sensación de perspectiva: el ritmo lento, la conducción lánguida y el mínimo ruido visual".
"Los precios siguen siendo razonables y todavía es posible conseguir los mejores asientos en la mayoría de los restaurantes frente al mar sin reserva", sentencia, contraponiéndolo con el común de los escenarios turísticos, mucho más estresantes y masificados.