El pueblo medieval con caserones y calles de piedra que está a una escapadita de Cataluña

El pueblo medieval con caserones y calles de piedra que está a una escapadita de Cataluña

Un municipio desconocido para muchos que ofrece una calma singular.

Bandera de Andorra ondeando en la Iglesia de Sant Corneli i Sant CebriàGetty Images

En el corazón de los Pirineos se encuentra Andorra, una región que alberga joyas naturales que parecen sacadas de una postal permanente. Esta pequeña nación, conocida por su clima fresco durante todo el año, ofrece rincones donde la historia y la arquitectura se funden con la naturaleza, con lugares donde parece que se detiene el tiempo. Concretamente, a solo unos pasos de la frontera con Cataluña se encuentra la escapada medieval perfecta para este verano.

Se trata de Auvinyà, un pueblo andorrano que pasa muy desapercibido por la gran mayoría de los visitantes. Con una población de apenas 200 habitantes, esta pintoresca localidad ofrece una atmósfera medieval como muy pocas otras pueden hacerlo. Se consolida como el destino ideal para aquellos que buscan escapar del calor sofocante mientras descubren rincones inolvidables con cierto encanto histórico y cultural.

Auvinyà, con sus calles empedradas y caserones de piedra, parece sacado de un libro del pasado. Los balcones de hierro consiguen fusionarse con la serenidad del entorno para ofrecer la experiencia más auténtica y cautivadora posible. Es cierto que Andorra cuenta con otros pueblos medievales de encanto similar, pero Auvinyà ofrece una calma que no se puede encontrar en ningún otro. Sus calles poco concurridas permiten la tan ansiada desconexión muchos buscan en esta época del año.

Todo un viaje al pasado

Los edificios de este pequeño núcleo han sido meticulosamente conservados, manteniendo intacta la esencia de un pueblo que ha resistido el paso del tiempo. Ahora bien, gran parte de esta buena conservación se debe a que este municipio es exclusivamente peatonal, por lo que antes de adentrarte por sus calles debes dejar el coche en la zona habilitada para el aparcamiento que podrás encontrar en la entrada.

El casco antiguo de Auvinyà es uno de los más bonitos de toda la región, con sus casas de piedra adornadas con flores y balcones de madera que evocan la vida de antaño. La piedra y la pizarra se usan en la mayoría de las edificaciones, ofreciendo una apariencia rústica y robusta que invita a adentrarse en sus callejones tan peculiares. Uno de los puntos más destacados es la iglesia de Sant Ivo, un verdadero símbolo del pueblo y un auténtico testigo de su historia medieval.

Esta iglesia de estilo románico destaca por su arquitectura sobria y elegante. Sus arcos semicirculares y pequeñas ventanas encandilan a los visitantes que tienen la suerte de visitar este escondido municipio. Además, en su interior podemos encontrar retablos y pinturas de una época pasada que ahora reflejan la devoción religiosa que han tenido los habitantes a lo largo de los años.

Espacio Eco
Un proyecto de Espacio Eco

Todo esto se encuentra a tan solo un par de horas en coche desde Cataluña. Una escapada a un destino que combina a la perfección historia, arquitectura y cultura. Este encantador pueblo medieval ofrece una experiencia única para aquellos que buscan desconectar y retroceder en el tiempo desde la comodidad de hacerlo en un clima fresco que facilita la labor turística. Un entorno de ensueño rodeado por la belleza natural de los Pirineos.