Una española pionera en inmunonutrición lanza un serio aviso sobre la comida fría: "Hace que tu sistema inmune no funcione"

Una española pionera en inmunonutrición lanza un serio aviso sobre la comida fría: "Hace que tu sistema inmune no funcione"

Ascensión Marcos, farmacéutica e investigadora española, profesora del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), apunta tanto a los alimentos como a la forma de tomarlos.

Mujer resfriada tomando sopa.Getty Images

Cómo comemos está estrechamente relacionado con cómo funciona nuestro organismo, también nuestras defensas. En investigar esta relación, conocida como inmunonutrición se ha dedicado Ascensión Marcos, farmacéutica e investigadora española, profesora del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), quien da unas claves en una entrevista con La Voz de Galicia sobre cómo la alimentación afecta a nuestro sistema inmunitario. Tanto a nivel de alimentos como de hábitos.

"Lo nuestro no se centra en incluir sueros con nutrientes específicos para fomentar el sistema inmune, sino algo más práctico, en el día a día, para ver qué déficit puede haber de determinados nutrientes y cómo afecta", señala al citado medio.

Precisamente, apunta a que la forma en la que comemos puede marcar cómo funciona nuestro sistema inmune. La especialista recomienda cocinar los alimentos y tomarlos despacio, ya que en el caso de no cocinar y tomar comidas frías puede aumentar el cortisol.

"Se ha visto que cuando uno come sin cocinar, durante una temporada determinada, toma preparaciones frías, aumenta el estrés. Con un aumento del estrés, crece el cortisol, y el cortisol es el primer inmunosupresor. Ese aumento de cortisol produce que tu sistema inmune no funcione", explica Marcos a La Voz de Galicia. 

También apunta que "la gente que tiene sobrepeso u obesidad suele comer deprisa, ingieren mucha cantidad de comida en poco tiempo y hay un estrés a la hora de comer". 

Aunque recalca que los alimentos de la dieta mediterránea son ricos en nutrientes que mejoran la microbiota, influye el tiempo de las comidas. 

"Una dieta mediterránea lleva consigo comer en compañía, que muchas veces no lo hacemos, lo hacemos en solitario y en diez minutos. Implica saborear los alimentos, a poder ser, en tranquilidad. Y además, que la comida sea de cercanía, que sea una dieta sostenible, con unas condiciones culinarias apropiadas. No es cuestión de comer un sándwich y ya está. Hay que cocinar", sentencia.

Marcos también recuerda que los tiempos de las comidas son importantes y que el desayuno es indispensable hacerlo "a primera hora, estar entre un cuarto de hora y 20 minutos tomándolo" para evitar tener que comer más a lo largo de la mañana. Del mismo modo, recomienda que las cenas no sean copiosas y que transcurran "unas dos horas entre cenar y meterse en cama".