Estos productos 'top ventas' del super tiene aspartamo y no lo sabes: así debes mirar el etiquetado
Su presencia debe indicarse siempre en la etiqueta del producto por su nombre o con un código.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha clasificado el edulcorante aspartamo como un posible cancerígeno. Al mismo tiempo, este organismo ha respaldado el límite de ingesta diaria aceptable para humanos, que estaba fijado en 40 miligramos por kilogramo de peso corporal.
Ha reafirmado, por tanto, que es seguro para la salud de una persona que consuma este edulcorante de forma diaria, siempre que se encuentre dentro del límite.
El aspartamo es un edulcorante artificial muy utilizado en alimentos y bebidas desde la década de 1980 como una forma de sustituir el azúcar.
Está presente en algunos productos como determinadas bebidas dietéticas, chicles, gelatina, helados, productos lácteos, cereales para el desayuno, dentífricos y medicamentos como pastillas para la tos y vitaminas masticables.
En Europa, el aspartamo está autorizado para su uso como aditivo alimentario para edulcorar una serie de productos alimenticios, como bebidas, postres, dulces, productos lácteos, chicle, productos hipocalóricos y para el control del peso y como edulcorante de mesa, como indica la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA).
Su presencia debe indicarse en la etiqueta del producto, ya sea con su nombre o con su código identificativo: E 951.
En rueda de prensa, el director del Departamento de Nutrición e Inocuidad de los Alimentos de la OMS, Francesco Branca, fue preguntado específicamente sobre qué debería hacer un consumidor en un supermercado, un bar o un restaurante si quiere un refresco: pedir uno tradicional, con azúcar, o uno con cero azúcar pero que contiene este tipo de edulcorante.
"Si los consumidores se enfrentan a la decisión de tomar un refresco de cola con edulcorantes o uno con azúcar, creo que debería considerarse una tercera opción, que es beber agua en su lugar, y limitar totalmente el consumo de productos edulcorados. Existen alternativas que no contienen otros azúcares o edulcorantes y esos deberían ser los productos preferidos por los consumidores", aconsejó.