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Francia mira sorprendida la aparición de 'supercentenarios' en sus islas perdidas a miles de kilómetros

Francia mira sorprendida la aparición de 'supercentenarios' en sus islas perdidas a miles de kilómetros

Registran una proporción de personas de más de 110 años ocho veces mayor que en el continente europeo.

Un grupo de casas en las Antillas francesas.Marc Guitard

Emilienne Bécarmin ha muerto y con ella ha desaparecido la tercera supercentenaria de Francia. Hasta aquí, una noticia sobre longevidad que no sorprendería a nadie si no fuera por un dato que los investigadores llevan tiempo intentando descifrar: en Guadalupe y Martinica, el número de personas que superan los 110 años es, en proporción, ocho veces mayor que en el resto del país, según FranceInfo.

El Instituto Nacional de Estudios Demográficos (INED) ha confirmado el fenómeno en un estudio publicado en 2024. Sus autores han cruzado datos, han analizado tendencias y han explorado hipótesis sin encontrar una explicación definitiva. Algunos creen que la clave podría estar en la historia: quienes sobrevivieron a la esclavitud, empezando por la travesía en barco por el Atlántico, tal vez hayan transmitido un gen de longevidad a sus descendientes. No hay pruebas científicas que lo respalden, pero la teoría sigue circulando.

Un fenómeno con rostro femenino

Si hay algo claro es que la longevidad tiene nombre de mujer. En Francia, de las 525 personas que han alcanzado los 110 años, 497 son mujeres y solo 28, hombres. La diferencia es abismal y no se limita a las islas caribeñas.

Además, el fenómeno no afecta solo a los supercentenarios. En medio siglo, el número de centenarios en el país se ha multiplicado por 30, lo que apunta a un cambio de fondo. Las grandes migraciones parecen ser un factor determinante. En general, quienes alcanzan edades extraordinarias han pasado toda su vida en el mismo lugar donde nacieron.

La dieta y el entorno como posibles claves

La alimentación se presenta como otra pieza fundamental. En las llamadas “zonas azules”, los lugares del mundo con mayor concentración de personas longevas, la dieta local juega un papel clave. Lo mismo sucede en Sardeña (Italia), Okinawa (Japón) o Ikaria (Grecia), donde los supercentenarios consumen alimentos de su entorno. En las Antillas francesas, la tendencia se repite.

Con todos estos datos, surge una pregunta: ¿ser isleño predispone a una vida más larga? La ciencia aún no tiene la respuesta, pero las cifras apuntan en una dirección clara.