Esto es lo que empezará a pasarte cuando dejes de beber alcohol
El alcohol es "un factor causal en más de 200 enfermedades, traumatismos y otros trastornos de la salud", según la OMS.
El consumo de alcohol es, según la Organización Mundial de la Salud (OMS) "un factor causal en más de 200 enfermedades, traumatismos y otros trastornos de la salud". En concreto, de algunos tipos de cáncer, de enfermedades cardiovasculares y de cirrosis hepática.
Un consumo nocivo del mismo, además, no es sólo perjudicial para la propia persona que lo ingiere, también para el entorno de la misma: sus familiares, amigos e, incluso, los compañeros de trabajo.
A nivel físico, las consecuencias son variadas. Y uno de los órganos más afectados por el consumo excesivo de esta sustancia es el hígado, dado que es el primer órgano del sistema humano con el que el alcohol que ingerimos entra en contacto. Aunque el cerebro y el corazón también son susceptibles.
Una de los primeros efectos que el alcohol tiene sobre el hígado es que lo engrasa, lo que, a su vez, hace que este órgano se inflame. La reacción del hígado no es otra que producir tejido cicatricial para curarse, tal y como ha explicado el profesor de Hepatología en la Universidad de Plymouth, Ashwin Dhanda, a elPeriódico.
Es el mismo experto el que ha apuntado que las personas que presenten este hígado graso, pueden volver a tener uno con un "aspecto y funcionamiento como si fuera nuevo", dos o tres semanas después de abandonar el alcohol.
En caso de que la situación sea más compleja y el órgano tenga cicatrices de carácter leve o presente inflamación hepática, una semana después se podrá comenzar a observar "una reducción notable de la grasa, inflamación y cicatrices hepáticas", apunta Danda. Y será unos meses después de abandonar el consumo cuando el órgano pueda curarse.
Sin embargo, cuando se trata de personas cuyo consumo los ha llevado a desarrollar patologías de carácter más grave, dejar el alcohol durante años "reduce la posibilidad" de que empeore la insuficiencia hepática y el fallecimiento.
¿Cuál es el consumo máximo?
Según un informe del Ministerio de Sanidad, se considera "consumo de riesgo" a partir de 40 gramos diarios, en el caso de los hombres, y alrededor de 20 y 25 gramos diarios, en el caso de las mujeres. "También, cuando se consumen bebidas alcohólicas de manera intensiva", recoge dicho informe. Es decir, cuando en un período de cuatro a seis horas, se ingieren 60 gramos o más de esta sustancia, en el caso de los varones, y 40 gramos o más, en el caso de las féminas.
En el mismo texto han compartido qué está considerado un consumo de bajo riesgo. En el caso de las mujeres, no exceder los 10 gramos diarios. Esto se traduce en un chupito o media copa de vino o una caña. Para los hombres, esta barrera se sitúa en los 20 gramos al día. Es decir, dos chupitos o una copa de vino o una jarra de cerveza.