El plato típico de octubre del que presumen en Madrid y tiene poderosas propiedades anticancerígenas

El plato típico de octubre del que presumen en Madrid y tiene poderosas propiedades anticancerígenas

Una nutricionista oncológica ha hablado de sus propiedades.

Mujer cortando repollo.Getty Images

El repollo no es una de las verduras más populares, pero sí que es protagonista de elaboraciones como el cocido madrileño. Esta verdura, que se toma rehogada en este plato, pertenece a la familia de las crucíferas, una tipología a la que los especialistas dan cantidad de beneficios.

Toral Shah, nutricionista oncológica, los elige como una elección "barata" y que podría ser beneficiosa para prevenir el cáncer. "El otoño es una época fantástica para enamorarse de estas verduras que mejoran la salud, ya que están de temporada ahora, lo que las hace frescas, más nutritivas y mucho más baratas en comparación con otras frutas y verduras", explica tal y como recoge The Express. 

"Las verduras crucíferas también son diversas y, por lo tanto, hay muchas oportunidades para incorporarlas a su dieta. Lo de asociar las coles de Bruselas y el repollo con la comida de tu abuela ha terminado: las verduras crucíferas tienen que volver al centro, ya que brindan muchos beneficios importantes para la salud, tanto para la salud intestinal como para la prevención de algunos tipos de cáncer", detalla.

La especialista destaca que estas verduras, entre las que destaca el repollo, tienen altos contenidos en betacaroteno, luteína, zeaxantina, vitaminas C, E y K, ácido fólico, minerales y fibra. Además de glucosinolatos, compuestos ricos en azufre que les dan su olor y sabor distintivos, que sería lo que se asocia con la supuesta prevención del cáncer.

Shah explica que, tal y como recoge un estudio del Francis Crick Institute (Reino Unido) el indol-3-carbinol, necesario para la formación de aminoácidos, y el sulforafano (un isotiocianato) tienen efectos anticancerígenos. 

Entre ellos, destacan la protección de las células contra el daño del ADN, la activación de carcinógenos, el efecto antiinflamatorio, la inducción de la muerte celular controlada (apoptosis) y la prevención de la metástasis tumoral al inhibir el crecimiento de los vasos sanguíneos (angiogénesis) y la migración celular.