Piden desterrar un alimento y bebida típica española de todas las cenas
Afectan directamente a la calidad del descanso.
Qué comer antes de dormir influye directamente en la calidad del sueño, así lo han demostrado diversos estudios. "La dieta puede influir en la calidad del sueño", apunta al Daily Mail Rob Hobson, nutricionista titulado y escritor. "Aunque conozcas los alimentos que ayudan a adormecerte, comerlos no cambiará nada si combates sus beneficios con otros alimentos que te mantendrán despierto", añade.
En este sentido hay varios alimentos que habría que dejar de tomar a última hora del día, en las cenas, por los inconvenientes que pueden despertar a la hora de conciliar el sueño. Uno de ellos es la hamburguesa, según un artículo de la revista Eatingwell, "su difícil digestión obliga al cuerpo a redirigir el flujo de sangre hacia el estómago". Además, según el medio rumano Fanatik, esto puede provocar acidez y el conocido reflujo y su "alto contenido en sal y puede debilitar el esfínter esofágico".
Otro producto que habría que eliminar de las cenas y que es especialmente común en España es el alcohol. Tomar una copa de vino o una cerveza con la comida antes de dormir es muy común, pero no es buena idea para el organismo. Según los especialistas, puede provocar deshidratación, bajar la calidad del sueño o puede contribuir a la acidez.
"El alcohol interfiere en el flujo de calcio hacia las células nerviosas, afectando la región del cerebro que controla la función del sueño", explica Hobson a Daily Mail. "Beber alcohol antes de acostarse también puede tener efectos rebote, haciendo que te despiertes durante la noche debido a la deshidratación o la necesidad de ir al baño, y en algunos casos también puede contribuir a la acidez estomacal”, añade.
Por último, tomar chocolate negro de postre no es recomendable, a pesar de ser de lo más común y de que hay gente que limita su última comida del día para darse ese "capricho". Según Hobson, se debe evitar por su alto contenido en azúcar y cómo afecta esto al sueño, provocando insomnio.
"Un exceso de azúcar también reduce la actividad de las células de orexina. Estas células estimulan partes del cerebro que producen dopamina y norepinefrina, dos hormonas que nos mantienen excitados y físicamente activos", señala y apunta al contenido en cafeína del chocolate negro, que puede tener en 50 gramos unos 25 mg de este estimulante.