La función oculta de la nevera que es obligatorio activar al hacer la compra en verano

Abrir la puerta de la nevera, colocar y cerrar. Normalmente ese es el proceso que todo el mundo sigue cuando llega a casa de hacer la compra, habitualmente con algunos parones para que el electrodoméstico no pierda temperatura y empiece a pitar.

Sin embargo, en verano, como recuerda Xataka, deberíamos añadir un paso más que la mayoría de las personas se salta. Al menos si tenemos un frigorífico relativamente moderno. 

Se trata de activar —por lo general, manualmente— la funcionalidad de enfriamiento rápido. Esta opción lo que hace, como explican desde la web de tecnología, es "poner a trabajar al máximo al compresor del equipo durante un cierto tiempo". 

De este modo, se consigue hacer bajar la temperatura del interior del aparato en un breve lapso de tiempo para que esos alimentos recién comprados se enfríen cuanto antes. Así, se evita romper la cadena de frío, esencial para la seguridad alimentaria, y se logra que se conserven en perfectas condiciones.

Desde el citado medio recuerdan que esta funcionalidad, que a veces recibe nombres del tipo "ultra cool", "coolmatic" o "rapid cool", suele desactivarse sola al cabo de unas pocas horas. 

Además de para preservar los alimentos recién adquiridos, puede ser interesante emplearla en esos momentos en los que necesitamos meter comida caliente en la nevera.