Los pediatras prohíben tajantemente estos objetos en el cuarto de tus hijos e hijas
Proteger la seguridad de la habitación de los más pequeños resulta fundamental para evitar posibles sustos.
Varios pediatras han señalado al 'HuffPost' estadounidense una serie de elementos comunes en los cuartos de los niños que podrían representar un riesgo para su seguridad. Desde muebles inestables hasta cordones de cortinas, estos objetos pueden acabar siendo bastante peligrosos en el entorno familiar.
Cuando pensamos en la "seguridad infantil" nos pueden venir a la cabeza elementos como las protecciones para escaleras o cubiertas para enchufes. Sin embargo, es esencial que, a medida que los niños crecen, los padres revisen también la seguridad de sus espacios. Ya que el hogar es donde los niños pasan la mayor parte del tiempo, es importante asegurarse de que no existan peligros en sus habitaciones.
Muebles no anclados
Los muebles que no están anclados a la pared, como estanterías y cómodas, son un gran riesgo. La Dra. Anita Patel advierte que los vuelcos son una de las principales causas de lesiones en los niños. Es recomendable anclar estos muebles a la pared para evitar accidentes, manteniendo esta práctica hasta la adolescencia.
Mantas pesadas
Aunque necesarias, las mantas pesadas pueden ser un peligro de asfixia para niños menores de cinco años. Como ejemplo de ello, Amazon dejó de vender ciertos productos de este estilo para proteger la salud infantil.
Tapas pesadas en baúles de juguetes
Aunque los cofres de juguetes son útiles, las tapas pesadas pueden causar lesiones si se cierran de golpe. El Dr. Brad Sobolewski sugiere optar por modelos con tapas ligeras o sin ellas, o instalar mecanismos de soporte para evitar cierres accidentales que podrían asfixiar a un niño.
Calentadores eléctricos o ventiladores
Durante el invierno, los calentadores pueden parecer útiles, pero representan un riesgo de incendio si los niños colocan objetos inflamables cerca. Se sugiere usar ropa de cama adecuada y un sistema de calefacción central.
Lámparas de pie y bombillas incandescentes
Las lámparas de pie pueden volcarse fácilmente. Se recomienda usar solo iluminación de techo o lámparas de mesa bien aseguradas, así como optar por bombillas LED para minimizar el riesgo de quemaduras.
Cuerdas largas
Los cordones de cortinas y persianas son un riesgo de estrangulación, advierte la Dra. Patel. Aconseja usar cortinas sin cuerdas o asegurarse de que estén fuera del alcance de los pequeños. Los cables de extensión también pueden ser peligrosos, por lo que se recomienda usar dispositivos inalámbricos.
Literas sin protectores
Las literas pueden ser prácticas, pero conllevan el riesgo de caídas, especialmente para niños menores de seis años. La Academia Americana de Pediatría aconseja evitar que los más pequeños duerman en la parte superior y sugiere instalar barandillas para mayor seguridad.
Finalmente, los expertos subrayan la importancia de adaptar las medidas de seguridad a medida que los niños crecen, fijándonos en los pequeños detalles que, aunque a priori, pueden pasar desapercibidos, pueden suponer un gran peligro.