La señal que explica el gran enfado que sufren algunos niños con altas capacidades al salir del colegio
Los más importante es escuchar a los pequeños.
Es relativamente habitual en los niños de altas capacidades que, minutos después de salir del colegio, estén más irascibles y surja algún tipo de rabieta. Beatriz Belinchón, divulgadora en redes sociales sobre niños de altas capacidades, ha dado algunas pistas en su perfil sobre por qué puede pasar esto sin motivo aparente.
La experta cuenta que estos niños estallan cuando "se alejan del centro, cuando se sienten seguros y saben que nadie les ve o escucha” y es en ese momento cuando “sacarán su ira o enfado ante cualquier motivo con el miembro de la familia que le ofrezca seguridad o se sienta más unido, en quien sienta que puede confiar”.
¿El motivo? Para Belinchón tiene que ver con la cantidad de tiempo que pasan sin manifestar sus sentimiendo. “Cuando pasan una media de seis horas reprimiendo sus emociones o rechazándolas, están listos para que cualquier motivo les haga enfadar y explosionar”, asegura en declaraciones recogidas por Serpadres. “Solo aprovechan cualquier motivo externo para liberar su emoción interna”, añade.
Además, la experta señala que los niños pueden sentir emociones negativas en el colegio por "aburrimiento, las habilidades sociales, la desmotivación, alta exigencia, o dificultades en la integración sensorial pueden ser motivo”.
Como consejo a los padres para actuar en una situación en la que el niño esté enfadado, Belinchón insiste en que "es importante escuchar, sostener, validar y conectar con su emoción".