Este es el tiempo que solían vivir los antiguos españoles y la edad de sus 'ancianos'
A los 30 años se estaba más cercano a la muerte de lo que se podía pensar.

La esperanza de vida en España se sitúa actualmente en 84 años, una de las más altas de la Unión Europea. Sin embargo, esto se debe a una evolución en los tratamientos y cuidados médicos que permite que las personas vivan más.
A lo largo de la historia, la tendencia ha ido a una mayor esperanza de vida conforme han aumentado los años, también debido a la erradicación de numerosas enfermedades. Por ejemplo, los antiguos griegos, que vivieron en España entre los siglos XIII y VII a. C aproximadamente no superaban en líneas generales entre los 35 y los 40 años, según informan en Sport Time.
Esta cifra, sin embargo, estaba influenciada por una importante mortalidad infantil, los que superaban la infancia, podían vivir hasta los 50 o incluso 60 años. Según el citado medio, aunque las personas mayores no eran algo común, sí que existían y eran honrados en consejos de ancianos.
En esa época, a diferencia de actualmente que se ubica en 85,1 años en mujeres y 79,7 años en hombres, la mortalidad de las mujeres era más alta debido a los riesgos del embarazo y el parto.
Pero esto también ha evolucionado con las distintas culturas. Según documentos encontrados en la necrópolis de Son Real y S´Illa des Porros en Islas Baleares, durante la cultura talayótica, de la época de los íberos, "la esperanza de vida para los individuos de más de 13 años era de 34,01 años (36,5 para los hombres y de 31,5 para las mujeres)".
Además, los investigadores apuntan que solo el 10% de los habitantes superaban los 50 años. "La mortalidad infantil era muy elevada; casi la cuarta parte de los niños moría antes de tener 4 años, y el 40% de la población moría entre los 30 y los 40 años; el hombre era más longevo que la mujer", señalan en la investigación.
En este sentido, los investigadores recuerdan que esto hacía que la vida adulta y la funcionalidad en cuanto al trabajo se desarrollase desde la infancia prácticamente, una vez que se conocían las actividades necesarias.