El jabón que usaban nuestros abuelos y hoy deberíamos volver a usar todos
Sirve para mucho más que para higiene personal.
Los remedios caseros para la limpieza cada vez incluyen más productos cotidianos como el vinagre, el limón o el bicarbonato de sodio. Pero hay otros muchos olvidados que podrían ser muy útiles para diversos trucos.
Se trata del jabón de glicerina, utilizado por nuestros padres y abuelos, generalmente en pastilla caracterizado por su color rojizo. El jabón de glicerina se utiliza, al menos desde el siglo VI a.C y se trata de una fórmula elaborada a partir de glicerina, un compuesto orgánico derivado del alcohol del azúcar que se encuentra en grasas animales o vegetales.
Hoy día está prácticamente en desuso a pesar de que hay formatos desde sólido a líquido y tener importantes beneficios para la piel, especialmente para las personas con la piel grasa con tendencia al acné.
Pero más allá de esto, tal y como recogen en la web Life Hacker, tiene otros múltiples usos. Por ejemplo, recomiendan usarlo en la ropa para eliminar manchas, especialmente de sustancias grasas como el aceite. Para usarla, recomiendan aplicarla directamente sobre la mancha y lavar la prenda en la lavadora con normalidad, aunque también se puede elaborar un quitamanchas casero mezclando la glicerina con detergente líquido y agua.
En segundo lugar, también recuerdan que se puede utilizar para quitar la comida reseca del fondo del frigorífico y el congelador. Primero hay que raspar la mayor cantidad posible de residuos y, tras esto, aplicar un poco de glicerina en la zona afectada dejando actuar unos minutos y limpiando tras esto. De esta forma conseguiremos que los residuos grasos se reblandezcan y se retiren con facilidad.
Además de en la casa, también puede usarse en el garaje o el taller gracias a sus propiedades anticongelantes y lubricantes. Por ejemplo, en la web apuntan a usarlo como lubricante de gatos hidráulicos para evitar que estos se congelen.