El Festival de San Sebastián confirma que no va a retirar la película 'No me llame Ternera'
José Luis Rebordinos, director del certamen, ha contestado rotundo a la carta firmada por 500 ciudadanos que pedía que no se proyectase la cinta en la que Jordi Évole entrevista a Josu Ternera.
Finalmente el director del Festival de San Sebastián se ha pronunciado a través de un comunicado ante la polémica suscitada por la proyección de la película No me llame Ternera, dentro de la programación del certamen, y que tiene como eje central una entrevista con Josu Urrutikoetxea, el exjefe de ETA conocido como Josu Ternera.
La cinta, dirigida por Jordi Évole y Màrius Sánchez, ha sido puesta en entredicho por la asociación Dignidad y Justicia que el pasado 8 de septiembre pidió a la Fiscalía un visionado previo antes de su proyección en Donostia por si se comete un delito de enaltecimiento del terrorismo.
De forma paralela, 500 personalidades del mundo de la cultura, la política y los medios de comunicación firmaron una carta en la que pedían que no se proyectara el documental dentro del festival.
Este martes, José Luis Rebordinos, director del Festival de San Sebatián, se ha pronunciado sobre esta petición, a pesar de que afirma no haber recibido la mencionada carta.
"En primer lugar, queremos hacerles llegar nuestro agradecimiento cuando en su carta afirman, entre otras cosas, que el Festival de San Sebastián 'rechaza el blanqueamiento del terrorismo” y “se adhiere a los principios y defensa de los Derechos Humanos'. No obstante, no compartimos su opinión respecto a que se deba retirar de la programación de esta próxima edición del Festival la película No me llame Ternera por el hecho de que tenga como protagonista a Josu Urrutikoetxea y que éste haya tenido muy altas responsabilidades en la trayectoria de la banda terrorista ETA", aclara contundente el escrito.
"El cine es, entre otras muchas cosas, fuente de la historia y se ha ocupado a menudo de llevar a la pantalla a protagonistas, perpetradores de episodios de violencias injustificables pero sobre las cuales sí ha tenido la voluntad de indagar", continúa explicando para después enumerar varios ejemplos, como La máquina roja de matar o Shoah, que han servido como arma de denuncia, "un medio para el análisis o una forma de intervención directa en muchos trágicos problemas".
"La no ficción que ahora nos ocupa ni justifica ni blanquea a ETA porque este Festival no proyectaría una película con esas premisas", afirma. "En definitiva, estimamos que la película No me llame Ternera ha de ser vista primero y sometida a crítica después y no al revés. En este sentido, estaríamos dispuestos a realizar una proyección privada previa a un grupo reducido en su representación", ofrece a quien tenga dudas sobre la posición del festival ante la insinuación de blanqueamiento.