Los actores de Hollywood, a la huelga: cuáles son los motivos y cómo afectará a series y películas

Los actores de Hollywood, a la huelga: cuáles son los motivos y cómo afectará a series y películas

Todas las claves de una protesta histórica que pone en jaque a la industria del entretenimiento.

Fotografía de archivo fechada el 6 de junio de 2023 que muestra a un manifestante mientras sostiene un cartel que dice "el Sindicato de Actores de Cine-Federación Estadounidense de Artistas de Radio y Televisión (SAG-Aftra) apoya al Sindicato de Guionistas de Estados Unidos (WGA)", frente a los estudios Paramount en Los Ángeles, California (EE.UU).EFE

Parálisis. Crisis. Abismo. Todas estas palabras se están usando para describir lo que supone la histórica decisión que ha anunciado este jueves el Sindicato de Actores de Hollywood (SAG-AFTRA). Tras no alcanzar un acuerdo para la renovación de un convenio colectivo con la Alianza de Productores de Cine y Televisión (AMPTP), han convocado formalmente la huelga y se suman la que mantienen los guionistas desde el 2 de mayo.

"Las respuestas de la AMPTP a las propuestas más importantes del sindicato han sido insultantes", rezaba el comunicado de la presidenta del sindicato, Fran Drescher, tras expirar el plazo para negociar.

Estas son las claves del conflicto en el corazón del entretenimiento mundial y en una industria que genera millones de dólares.

A cuántos actores afectará

El sindicato representa a más de 160.000 actores —cifra notablemente mayor a la de los guionistas en huelga: 11.500—. Quedarían fuera los de producciones independientes.

Actores de la talla de Kevin Bacon, Glenn Close, David Duchovny, Eva Longoria, Jennifer Lawrence, Mark Ruffalo, Meryl Streep, Rami Malek, Amy Schumer o Ben Stiller (y así hasta 300 nombres) ya firmaron una carta de apoyo en la que sostenían que estaban preparados para la huelga.

Cuáles son los motivos de la protesta

Obviamente, hay motivos laborales como mejoras salariales y de las condiciones del trabajo. También están en juego el pago "justo" de los derechos residuales —por la reutilización de sus obras— por parte de las plataformas de streaming.

Hay otro punto llamativo: la regulación del uso de la inteligencia artificial en la industria. En el gremio preocupa que, a través de esta nueva tecnología, se usen su apariencia y su voz, los deepfakes, o que suponga un recorte de puestos de trabajo. Los guionistas, por su parte, temen que se recurra a estos asistentes para escribir los textos de las producciones.

Por qué es una huelga histórica

La última huelga de los actores estadounidenses tuvo lugar en 1980 —es decir, no ocurría desde hace 43 años—. En aquella ocasión, como recuerda EFE, duró tres meses y se desencadenó "por los beneficios de las cintas de vídeo domésticas y la televisión de pago".

Además, supone la primera huelga simultánea junto con los guionistas en 63 años. La única vez que ambos gremios estuvieron huelga a la vez fue en 1960 y entonces obtuvieron beneficios como "acceso a seguro médico y una pensión".

Cómo afectará la huelga a series y películas

Sin guionistas y ahora también sin actores, el escenario es más que crudo para todas las producciones en marcha o a punto de iniciarse. En el caso de las series de televisión, el inicio de la temporada de otoño se vería directamente afectado. Decenas de producciones están directamente paralizadas desde el inicio de la huelga de guionistas, como Stranger Things o Euphoria.

Plataformas como Netflix sí podrían seguir produciendo en otros países, pero no en Estados Unidos. En cuanto a las cadenas estadounidenses, podrían tirar de reposiciones y de reality shows tipo Big Brother (Gran Hermano).

El impacto en el cine no sería tan inmediato puesto que los próximos estrenos están rodados hace tiempo, pero sí podría afectar a futuras producciones como Blade.

En qué más puede afectar

Para empezar, habría que decir adiós a entrevistas, actos promocionales, alfombras rojas y galas. Los actores no podrán promocionar sus series y películas, ni participar en encuentros con seguidores y peligran la celebración de los premios Emmy, cuya ceremonia estaba prevista para el 18 de septiembre y que, con mucha probabilidad, tendrá que ser retrasada algunos meses.

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