27 mujeres acusan al director de 'Ni una más', Eduard Cortés, de acoso sexual
Lo han hecho en declaraciones, algunas anónimamente, para 'El País', que también ha contactado con el acusado.
El País ha recogido el testimonio de 27 mujeres que acusan al director de Merlí y Ni una más, Eduard Cortés, de acoso sexual. Entre ellas, se encuentran las actrices Norah Alexandra Vega, Sofía Barco y Nicole León, la fotógrafa Silvia Grav y la artista visual Eva Fábregas. Tal y como recoge el rotativo, tanto ellas como el resto de féminas que han atendido al diario consideran que el cineasta se habría beneficiado de su posición en la industria ofreciéndoles algún trabajo en uno de sus proyectos, pero a cambio de que ellas realizaran un vídeo desnudas llevando a cabo algún tipo de práctica sexual.
El mismo medio señala que el detonante de este goteo de testimonios tuvo lugar el pasado 26 de octubre, días después de que saliera a la luz el caso Errejón. Entonces, la fotógrafa Silvia Grav compartió a través de su perfil de Instagram mensajes antiguos que habría intercambiado con Cortés. En ellos, según recoge El País, lo acusaba de acoso en Internet, a los que se sumaron más mujeres, de nuevo, a través de sus respectivos perfiles en redes sociales.
"Este señor me contactó cuando yo tenía 19 años y él, 55, prometiendo ayudarme profesionalmente", expresó Grav entonces. Este texto que publicó en su perfil venía acompañado de una imagen de Eduard Cortés. Y, según el periódico, varias mujeres contactaron con ella. Algunas se han unido a un grupo de WhatsApp llamado "Ni una más".
Tal y como ha podido confirmar El País, el director de proyectos como Ni una más contactaba con las mujeres a través de redes como MySpace, Messenger, Fotolog, Facebook e Instagram, aunque algunas han narrado que también conversaron con vía videollamada y por correo electrónico. También han contado que el director supuestamente usaba el seudónimo Gato del cerro, pero una vez iniciada la conversación, ya han reportado que se presentaba con su nombre real.
Cortés ha respondido a estas acusaciones en unas declaraciones que ha difundido el diario El País. "Lo único que puedo decir es que yo hice un proyecto que se llamaba Ingrid, que estaba vinculado a las redes sociales, y contacté con muchísima gente durante esa época", ha indicado el cineasta, en las declaraciones que ha difundido el medio y en las que se refiere a antes de 2009, cuando se estrenó la película.
"Las conversaciones en redes sociales se produjeron dentro de lo hipotético, buscando conexiones entre el modo de actuar del personaje y nuestra experiencia personal. Nunca eran propuestas explícitas", ha agregado el cineasta. Lo ha hecho en una declaración que mandó por correo electrónico al diario y que, según El País, está supervisada por su equipo legal.
Ofertas de trabajo para iniciar las conversaciones
Las mujeres que han hablado con El País han facilitado algunos mensajes que supuestamente han intercambiado con el cineasta. "Me dijo: ‘Tienes talento, eres bella, inteligente y joven, tienes muchísimo potencial", ha contado Grav, que también ha precisado que, en el momento de la conversación, se encontraba "en una situación bastante vulnerable en un entorno profesional".
La fotógrafa ha contado que Cortés "se mostró interesado" en ofrecerle algún tipo de trabajo en uno de sus proyectos. "Me llegó a plantear que quizá podría dirigir", ha añadido. Sin embargo, ha contado que, tras un mes del primer contacto, el tono de sus conversaciones tuvo un cambio. "Comenzó a preguntarme cómo me sentía al respecto de hacer desnudos, si había algo que se aproximara a una experiencia sexual en ello", ha explicado Grav. Y, a pesar de haber reconocido que se encontraba "incómoda con la situación", prefirió no hacérselo saber "por miedo a que dejara de tener interés en ayudarme profesionalmente".
15 se preparan para denunciar
El mismo periódico ha recogido que 15 de las 27 mujeres con las que ha conversado están preparándose para denunciar. Por ahora, y según ha difundido el rotativo, en las últimas semanas ya han acudido a un despacho de abogadas para recibir asesoría jurídica. Asimismo, han estado recopilando algunas evidencias.
Estas, que han apuntado a El País, han hablado de los altos costes que puede tener acudir a servicios jurídicos. En este sentido, han manifestado al medio la "inacción" de algunas instituciones culturales que cuentan con servicios de apoyo a las víctimas de violencia en el ámbito del cine.
Por su parte, el periódico ha contactado con la Academia de Cine Catalán, la misma a la que perteneció el propio Cortés. El organismo se comprometió a ejecutar una investigación dadas las acusaciones que se habían hecho al director a través de Internet. Y, antes de que el organismo lo citara a declarar para emprender este proceso, él se dio de baja del mismo en noviembre. Él ha afirmado a El País que lo hizo "por motivos personales".
En cuando a la Academia, según el rotativo, han recomendado a las mujeres que han hablado con el medio solicitar ayuda al despacho de Carla Vall, que colabora con la institución cinematográfica.