Conservamos mal el pan y un panadero se pone serio: " Así, el moho tiene rienda suelta"
A evitar para que se conserve crujiente y en las mejores condiciones.
A la hora de comprar pan y elegir cómo conservarlo para que se mantenga en las mejores condiciones el mayor tiempo posible surgen muchas dudas. Que si es mejor comprarlo entero o rebanado, si es bueno mantenerlo en una bolsa de plástico, cómo hacer si lo voy a congelar o si es mejor descongelarlo en el microondas o en el tostador.
Xavier Barriga, experto en panadería, dio unos consejos en La Vanguardia en los que dejó claro qué era lo que había que evitar para que el pan no coja humedad, se seque o se estropee antes de tiempo.
En primer lugar, avisa del gran error común que se comete a la hora de conservar el pan y es mantenerlo en una bolsa de plástico. Tal y como señala Barriga, esta bolsa no transpira y genera humedad, por lo que el pan se estropeará: "el pan la absorberá y nos quedará blando, perdiendo la dureza de la costra y su textura crujiente". Lo contrario ocurre con los panes de molde o de corteza blanda, para los que asegura que el plástico es la mejor forma de conservarlos. Para los de corteza crujiente, lo mejor es mantenerlos en una bolsa de algodón tradicional o una panera de madera.
También recomienda no dejarlos en zonas donde los cambios de temperatura sean muy bruscos, haya mucho frío o aire, pero además alejados del sol directo.
A pesar de que otra de las costumbres más comunes es que si se compra una pieza de pan grande, como una hogaza o un payés, se pida rebanado. Barriga recomienda no hacerlo. "Cuando cortas el pan entra aire entre las rebanadas y eso facilita que se seque antes", detalla y pide hacerlo conforme se va consumiendo el pan.
Si eres de los que opta por congelarlo y tener pan para toda la semana, recomiendan envolverlo en aluminio y meterlo en una bolsa de plástico o bien solo con la bolsa de plástico o en un táper hermético. Para Barriga, lo importante con esto es "conservar bien su humedad con un buen envoltorio que lo aísle del aire". También recomienda hacerlo partido y así poder coger solo lo necesario.
A la hora de descongelarlo, el experto lo tiene claro: mejor en tostadora que en microondas. "Si lo pones en el microondas lo has de comer al momento porque si te esperas diez minutos ya no vale nada", explica y recuerda que si se hace en tostadora u horno puede recuperar perfectamente la corteza crujiente tras ser congelado.
