La súper empresa detrás de la moda del café con aceite de oliva
Se trata de una nueva línea con tres bebidas.
Los beneficios del aceite de oliva virgen extra son cada vez más conocidos y extendidos, por lo que cada vez es más común que se empleen en productos y recetas donde este es poco habitual. Una de ellas es el café, con su variante conocida como oleato, que ha llegado hasta una de las franquicias más populares, Starbucks.
Bajo el nombre de Oleato, la compañía oferta tres tipos de café en sus establecimientos de Italia, Estados Unidos y Canadá, así como en las ciudades de París, Londres, Osaka y Tokio.
El primero de ellos es el Oleato café latte, con leche de avena y aceite de oliva virgen extra de Partanna vaporizado. La segunda opción, con la llamada golden foam, cuenta con una "exuberante crema dulce de vainilla que se espuma fría con aceite de oliva extra virgen Partanna" y toques de toffee.
El tercer producto de esta línea es un espresso "helado y agitado con sirope de avellana, leche de avena y hielos". Sin embargo, en su cafetería especial de Milán, Starbucks Roastery, se sirven otros productos como el Oleato Iced Cortado "con una pizca de amargo de naranja y una pizca de cáscara de naranja", el Oleato Deconstructed "con una demitasse de Starbucks Reserve Espresso, una prensa de aceite de oliva extra virgen Partanna y espuma fría de maracuyá", así como una variante del golden foam con Martini.
Aunque los que deciden introducir el aceite de oliva virgen extra al café se escudan en sus beneficios antiinflamatorios y su riqueza en polifenoles, la especialista Beata Rydyger señala a Healthline que no hay beneficios demostrados: "Añadir aceite de oliva al café no es tan común, por lo que no hay muchas pruebas científicas que respalden que ofrezca algún beneficio específico para la salud".
Además, los expertos en nutrición recuerdan que, aunque sea una grasa saludable, no deja de aumentar el contenido calórico y puede no ser del todo recomendable para algunas personas, especialmente aquellas con problemas estomacales.
En caso de querer introducirlo, tal y como recoge La Vanguardia, el barista Rufus Gideon, establece que hay dos maneras: con el café solo, que no recomienda ya que el aceite "corta" el café; y con leche, cremándola con un vaporizador, "se emulsiona la leche con el aceite, y se integra mucho mejor con la leche, creando una mezcla homogénea".