No digas adiós a tu viejo estropajo: así puede ayudarte a cuidar las plantas
Como hay que cambiarlo con frecuencia, podemos reutilizarlo en el jardín.
Son uno de los elementos a los que no se les suele prestar suficiente atención en las cocinas, pero un estropajo que no está adecuadamente desinfectado puede contener muchas bacterias y gérmenes que encuentran en él el lugar donde reproducirse. Por eso es conveniente, además de desinfectarlo cada dos o tres días, cambiarlo con cierta frecuencia.
Y antes de tirarlo a la basura, podemos darle otro práctico uso que encima nos ayudará a mantener nuestras plantas radiantes y en perfecto estado.
"Con su textura porosa y absorbente, la esponja retiene el agua por un momento, como un depósito de agua, permitiendo así que las raíces atraigan la humedad que necesitan y espaciando los riegos y evitando que el sustrato se seque", escriben en la sección Casa y Jardín en Le Figaro.
Un recurso que nos será de suma utilidad si vamos a estar fuera unos días pues "una esponja húmeda con el lado suave contra el suelo en la base de las raíces de una planta puede proporcionar el agua que necesita".
Además, como indican en la web, también se puede utilizar para que crezcan las plántulas —la planta en sus primeros estadios de desarrollo—: se corta en pequeño dados la esponja, se humedece y se insertar la semilla para que, en unos días, empiece a crecer.