Mercadona enamora al bajar el precio del vino más fresco para el verano

Rompiendo tópicos. Un vino rico es un vino bueno, si te gusta y está bien hecho. No hay que ponerse siempre gourmet y limitarse a esos vinos tintos con cuerpo, y alma, de toda la vida, pero que cuestan un dineral. Tampoco es cuestión de descartarlos, cuando te los puedes permitir y la ocasión lo merece. Pero a los que nos gusta el vino, en general, también nos gustan los blancos, los rosados o frizzantes (o, lo que es lo mismo, espumoso, en castellano). Todo depende del momento y de la época del año. Y de que esté bien logrado.

Recuerdo que hace unos años, a un amigo le daba miedo darme a probar un vino blanco que hacía su padre en su pequeño viñedo, en un pueblo de Pontevedra. Resultó ser un vino con cuerpo, con poso, joven, pero a mí me supo riquísimo. Esto viene a cuento porque, en el caso del gusto por el vino, hay un momento para probar cada tipo.

El tiempo de Sílaba Frizzante es, sin duda, es el verano, o esos primeros días de la primavera que empezamos a sentir el calor. Este un rosado espumoso, de Mercadona, compite con su versión en blanco y consigue salir muy bien parado.

En su promoción, la compañía promete una sensación “fresca y brutal”. Fresca, desde luego; a brutal podríamos añadir que lo es si tienes en cuenta que te estás tomando un vino con un sabor muy logrado. Recordemos que este tipo de vinos cogen su característica tonalidad Barbie, a grandes rasgos, porque procede de uvas tintas que han tenido muy poca maceración. En este caso, muy poco, dado su color muy clarito. Cuanto menos tiempo, más claro; cuanto más se macere, más intenso es su color rosa, acercándose al púrpura.

Quizás no combine ideal con un bistec poco hecho, pero sí con la mayoría de los aperitivos, las ensaladas, los arroces, el pollo y los pescados. Y para los que lo prueben y les guste o para los que ya sean aficionados a este tipo de vinos o, como nos pasa a algunas personas, a todos, no dejes de probar Aire, otro vino parecido, éste pertenece a Protos, y sale algo más caro, aunque sin exagerar (unos 8 euros).