La guía desconocida del uso del aceite de oliva de 0,4º y 1º
Una diferencia que es muy necesario conocer.
Suave o intenso. Por estos nombres quizás le conozcan. El aceite de oliva en su categoría comercial está dividido en estas dos modalidades. Lo que quizás no sea tan popularmente conocido es que estamos hablando de productos entre la graduación 0,4º y la de 1º, procedentes de una mezcla de aceites de oliva refinados y aceites de oliva vírgenes.
Bajo una etiqueta con la siguiente descripción, "contiene exclusivamente aceites de oliva refinados y aceites de oliva vírgenes", a menudo pasa inadvertido el porcentaje concreto de cada tipo. Es decir, cuánto hay de refinado y cuánto hay de virgen. Según una publicación de la firma especializada Aceite de las Valdesas, la mayoría se mueven en el entorno del 80 y el 90% de refinado frente a un 10 o 20% de virgen, un proceso de adicción que se denomina 'encabezado'.
Según la mencionada publicación, existe un vacío en la regulación que permite realizar mezclas bajo un único requisito, que la acidez de cada tipo a comercializar sea de 0,4º y de 1º. ¿Cuál es la diferencia? Principalmente, está en la cantidad de aceite de oliva virgen con la que se realiza la mezcla, pero también entran en juego factores como la intensidad o variedad de sabor.
¿Qué aceite debería elegir, suave o intenso?
Siguiendo esta dinámica, se puede llegar a una conclusión lógica y generalista, el aceite de oliva intenso tendrá mayor posibilidades de contener, en proporción en la mezcla, aceites vírgenes frente a los refinados. Por este motivo, si se busca un producto de estas características, la mejor opción para inexpertos será elegir un aceite de oliva intenso.