La catástrofe que hace fuerte al pistacho español

La catástrofe que hace fuerte al pistacho español

Muchos agricultores han decidido cambiar la vid y el cereal por este fruto seco.

Árbol de pistacho.MIGUEL_ANGEL_ORTEGA

En España, la cantidad de terreno dedicada al cultivo de pistachos se ha multiplicado casi por cinco en los últimos años. Según cifras del Ministerio de Agricultura, en 2020 alcanzó las 48.000 hectáreas plantadas con este fruto seco y en 2024 ha alcanzado las 79.000 y ha convertido a nuestro país en el mayor productor de Europa y cuarto del mundo.

Y todo esto a pesar de que la producción española aún es "limitada" porque la gran mayoría de las parcelas no han entrado en producción pues han de pasar al menos siete años para que un árbol recién plantado da su primera cosecha.

La mayor parte de los pistachos se cultivan en Castilla-La Mancha, Extremadura y Andalucía, regiones que se enfrentan a la escasez de agua debido al cambio climático, pero que en el caso de este cultivo facilitan su aclimatación.

Además, el cultivo de pistacho ha acabado siendo más rentable que el de la vid o los cereales, por el bajo precio y las sequías, y eso ha impulsado a muchos agricultores españoles a cederle su sitio a este fruto alargado, pequeño y verde con una cáscara dura y de color marrón claro que se consume como aperitivo y que cada día tiene más espacio en las cocinas.