El aceite de oliva español mantiene en vilo a 7 economías globales

La crítica situación respecto al precio del aceite de oliva que se ha experimentado durante este último año, ha supuesto un grave contratiempo en el día a día de millones de personas: trabajadores del sector, ciudadanos, familias, etc.

Y es que, el incremento del precio del aceite de oliva virgen extra, provocado por las malas cosechas del pasado curso, sumado a un contexto inflacionista, no solo han afectado a la hora de adquirir este preciado producto, sino a muchos otros -efecto mariposa-, contagiados y obligados a subir los precios por el aumento de los costes a la hora de elaborar sus productos.

Esta situación se ha producido además en un momento donde la inestabilidad económica, social y política reinan a nivel mundial, y esto, evidentemente, tampoco ayuda. Pero la situación parece que cambiará a partir de los próximos meses si se hace caso a las predicciones de los trabajadores del sector, que miran con precaución, pero optimismo, como se está desarrollando la cosecha de cara a este 2024-2025.

Y esto, como ocurre actualmente en todos los sectores económicos, tendrá su repercusión en la economía de infinidad de países además de la española, que son dependientes de las importaciones de aceite español, ya que hay que recordar que nuestro país es el mayor productor y exportador de aceite del mundo, por lo que su papel en este tema es de absoluta trascendencia.

Según las estimaciones de los productores, la mejora en la cosecha de esta temporada en comparación con la pasada es más que significativa y definen como "ideales" las condiciones en las que se están desarrollando. Esto traerá consecuencias positivas tanto para el mercado mayorista como para el minorista y, por tanto, los hogares españoles.

Con los datos sobre la mesa, esta campaña se augura mucho mejor que la anterior, aunque hasta dentro de dos meses no se sabrá con certeza. Pese a ello, se estima una progresiva y considerable reducción de precios e inflación en los precios de los alimentos.

De acuerdo con los datos aportados por la Sociedad Científica de Enciclopedistas del Cultivo del Olivo, se cree que, salvo catástrofe impredecible, este año la producción de aceite a nivel mundial sea de entre 3 y 3'2 millones de toneladas. Así, los precios podrían bajar sustancialmente desde los 9 euros en los que se estableció el pasado año hasta los 5 o 5,5€/l.

Por todo esto, hasta siete países se encuentran expectantes ante la bajada de los precios, ya que esto repercutiría favorablemente a sus intereses, reduciendo la inflación en sus economías y estabilizando la situación en la medida de lo posible: