Burger King decide cobrar un producto que antes era gratis y se abre un debate

El año 2023 se estrenó en España con un nuevo impuesto: el de los envases de plástico no reutilizables. Una medida que persigue reducir su uso y que grava con 0,45 euros por kilogramo la fabricación, importación y compra dentro de la Unión Europea de este tipo de plásticos, con los que mantiene una particular guerra desde hace años.

Así lo establece la Ley de Residuos aprobada en esta legislatura, que transpone las directivas europeas 2008/98/CE y 2019/904 y con la que el Ejecutivo español pretende recudir la comercialización de los plásticos de un solo uso en un 50% en 2026 y un 70% en 2030. Además, el texto legal establece que a partir de 2023 estará prohibida su distribución de forma gratuita y cobrará un precio por cada uno de los productos de plástico que se entregue al consumidor, diferenciándolo en el ticket de venta.

Escudándose en el impuesto sobre los envases de plástico no reutilizables aprobado por el Gobierno de España, Burger King aplica desde principios de año el cobro de uno de los productos que hasta este momento entregaba gratis junto a sus productos: los sobres de kétchup. La cadena de comida rápida cobra 5 céntimos de euro por cada sobre extra que se pida de esta salsa. 

"El kétchup ilimitado no tenía sentido porque se acababa desperdiciando mucho producto, es algo que hemos comprobado y que teníamos que atajar", explicaba entonces Restaurant Brands Iberia (RBI), responsable de la marca en España. “Si el cliente desea más cantidad de kétchup puede solicitarlo a un precio muy bajo, fomentando así una compra consciente del producto”, precisan sobre a su manera de contribuir a la lucha contra el desperdicio alimentario.