Un estudio descoloca a los científicos: las ardillas se han vuelto carnívoras
Cazan, matan y consumen "topillos", una pequeña especie de roedor.
Un análisis presentado este miércoles en la revista científica Journal of Ethology ha identificado que las ardillas terrestres de California, además de su dieta basada en semillas y otras partes de plantas, también cazan, matan y consumen "topillos", una pequeña especie de roedor.
El trabajo, liderado por investigadores de la Universidad de Wisconsin-Eau Claire y la Universidad de California, Davis, es el primero que documenta cómo ardillas californianas de diferentes edades y géneros cazan y se alimentan de estos animales, que habitualmente son presas de aves rapaces, coyotes, mofetas y otros depredadores.
Esta especie de ardilla, comúnmente vista en parques y bosques de Estados Unidos, es conocida por ser herbívora y alimentarse de semillas de gramíneas, robles y vegetación variada, como hojas, flores, tallos, brotes, raíces y ramas.
Sin embargo, el estudio ha registrado 74 casos en los que las ardillas terrestres han cazado o consumido estos roedores. Este comportamiento se observó principalmente durante las dos primeras semanas de julio de 2024, coincidiendo con un aumento en la población de topillos en el Briones Regional Park, ubicado en el condado de Contra Costa.
Según el artículo titulado Caza de topillos: nuevo comportamiento depredador y carnívoro de las ardillas terrestres de California, publicado en Journal of Ethology, no se ha documentado este tipo de conducta con otros mamíferos.
"Nunca habíamos visto este comportamiento. (...) Esto nos dice que hay mucho más que aprender sobre la historia natural del mundo que nos rodea", comenta Jennifer E. Smith, una de las principales autoras y profesora asociada de Biología en la Universidad de Wisconsin, según un artículo del centro educativo.
Por su parte, Sonja Wild, también responsable de la investigación, subraya que la capacidad de las ardillas para "adaptarse y responder a los cambios en la disponibilidad de alimentos podría ser clave para sobrevivir en entornos alterados por la actividad humana".
Los investigadores planean regresar al área de estudio el próximo verano para intentar resolver preguntas pendientes, como la posible transmisión de esta conducta entre generaciones, su extensión en otras poblaciones de ardillas y las implicaciones ecológicas de este comportamiento.