Ni la nevera ni el horno: este es el aparato común en cocinas españoles donde anidan cucarachas
Los microondas son lugares en el que más a menudo suelen quedar restos que atraen a estos animales
Su resistencia y su ingenio para sobrevivir, mucho nos tememos, que por los siglos de los siglos, no es discutible. De hecho, que se sepa, las cucarachas ya existían hace 300 millones de años, en la versión o especie que sea. La cuestión es que aún nos las seguimos teniendo que ingeniar para acabar con ellas o, en mejor de los casos, para evitarlas.
La clave para ello es, en teoría, sencilla: no dejar absolutamente ni una miga de comida por ninguna parte de nuestra cocina, ni de ninguna otra habitación de nuestra casa. El problema es que hay electrodomésticos que usamos tan frecuentemente que es realmente complicado evitarlas en ellos. El caso más llamativo es el del microondas.
Porque las cucarachas se ven atraídas por los espacios en los que pueden encontrar restos de alimento y son capaces de colarse por el rincón más minúsculo si los detectan.
Se cree que existen más de 3.500 especies de cucarachas, aunque la que más se ve en las zonas urbanas es la llamada cucaracha alemana. Es la más común que se puede encontrar tanto en las viviendas como en los restaurantes o en el hoteles.
Hay una forma de detectar si hay cucarachas escondidas en tu microondas. Se trata de seguirles el rastro. Si, de repente, ves una fila de puntos negros, como si fuera pimienta, sobre el cristal en el que pones los alimentos dentro del microondas o en alguna esquina del aparato, es un signo de que ha dejado rastro de su materia fecal.
¿Qué puedes hacer entonces? Hay diversos consejos que dan los expertos en eliminación de plagas, algunos quizás más radicales, pero vamos a apuntar algunos sencillos y caseros. El primero es hacer una mezcla con bicarbonato de sodio y azúcar y, con el microondas desenchufado, colócalos en un pequeño recipiente tapado dentro del microondas. Su olor ayudará ahuyentarlas. Cuando no vuelvas a ver restos de ellas, desinfecta bien el electrodoméstico varias veces.
También puedes usar una mezcla de agua y vinagre, a partes iguales y limpiar el aparato con ella, bien impregnado, tanto por dentro como por fuera. Y un último truco es empapar bien un trapo en aceite y vinagre, en lugar de con agua. Lo importante, optes por el sistema que optes, es que diariamente limpies bien con agua y jabón los restos de la comida que hayas cocinado en el microondas, asegurándote de secar todo bien e intentando que no quede ningún olor a comida en él.