Esta es la raza de perro que menos ladra
Presente unos rasgos y actitudes que no son habituales en estos animales.
La raza de los perros suele ser determinante a la hora de querer adoptar a unos o a otros, y es que su tamaño, carácter, afabilidad y un sinfín de características, vienen determinadas por su raza. Pese a parecer extraño, esta condiciona hasta la frecuencia, el tono y la manera de ladrar, aunque esto pueda llegar a parecer algo instintivo y natural.
Cuando pensamos en un perro muy ladrador, en la mayoría de los casos se nos viene a la cabeza un chihuahua o alguna raza de pequeño tamaño (“perro ladrador...”) y es que el tamaño del perro también influye en este sentido, siendo importante su ADN en la manera de actuar y comportarse con otros perros y con las personas.
En este caso, lo llamativo es que, hay una raza de perro que, está científicamente demostrado que ladra mucho menos de lo habitual, cambiando el tono y la frecuencia. Al igual que pasa con los perros que ladran mucho, también hay canes que se sitúan en el polo opuesto, siendo uno de estos casos los Basenji. Se podría catalogar a esta raza como pequeña-mediana, pudiendo alcanzar entre 10 y 13 kg, siendo originarios de África Central, concretamente del Congo.
Características de los Basenji
Pese a no ser muy populares en España, se considera una de las razas más compatibles con el ser humano por sus similitudes a la hora de comportarse, su autonomía con el lavado y su ‘saber estar’ en ciertas situaciones en las que otros perros no se consideran especialmente aptos. Se podría decir que son perros considerablemente maduros y dóciles.
La particularidad de no ladrar es cierta, pero requiere ciertos matices. Lo que ocurre con estos perros es que no presentan un ladrido típico y es que, la anatomía de su laringe es distinta. Esto provoca que sus cuerdas vocales sean más estrechas y no puedan reproducir el sonido ‘estándar’ de un ladrido, por lo que recurren a un aullido más prolongado en el tiempo.
Entre otras de las características de los Basenji destaca su gran fortaleza inmunológica, lo que les permite no coger enfermedades con la misma facilidad que otros perros, estando demostrado que son los canes que menos visitan al veterinario. Además, para mantener esta condición, requieren de una gran higiene corporal, siendo en este aspecto muy parecidos a los gatos junto a una gran condición física, algo que se les presupone ‘obligatorio’ en su día a día, siendo un perfecto compañero a la hora de realizar ejercicio físico.