Adiós a los piojos de siempre: estos bichos han evolucionado y con ellos las formas de combatirlos

Existe cada vez más evidencia de que los piojos están desarrollando resistencia a estos productos químicos , lo que hace que los tratamientos sean menos efectivos con el tiempo. Y es que muchos productos de venta libre contienen insecticidas que matan los piojos al contacto, pero es posible que no maten los huevos. Si el tratamiento no se completa según las indicaciones, algunos piojos pueden sobrevivir y continuar reproduciéndose.

Estos cambios han hecho que las autoridades sanitarias de muchos países recomienden utilizar principalmente, para acabar con ellos, el método de “acondicionador y peine” , también conocido como “peinado húmedo ”. Este proceso no utiliza productos químicos y se basa en la eliminación física de piojos y liendres.

Hay una serie de pasos que conviene dar para acabar con ellos, según aconsejan los expertos. En primer lugar inmovilizar los piojos, aplicando acondicionador sobre el cabello húmedo y dejándolo actuar durante 20 minutos. Esto evita que los piojos se muevan.

En segundo lugar, hay que proceder a quitar los piojos adultos. La manera de hacerlo es  peinando el cabello con un peine específico para ello, que tiene los dientes muy finos y largos, limpiando los piojos y el acondicionador con papel de cocina o pañuelos de papel. Después conviene repitir el proceso una semana después. 

Es decir, hay que realizar el mismo procedimiento de nuevo al cabo de siete días para eliminar los piojos nuevos antes de que comiencen a poner huevos. Este método funciona porque los piojos jóvenes son más fáciles de eliminar que los huevos, evitando así que el ciclo de infestación continúe, resaltan los especialistas sanitarios.

Finalmente, recomiendan una serie de medidas para evitar que los piojos reaparezcan, 

Debemos revisar periódicamente el cabello de los niños , especialmente detrás de las orejas y en la nuca. También hay que evitar compartir cepillos, sombreros y accesorios para el cabello en la casa. Cada persona debe tener sus utensilios. Otra medida es recoger cada día el pelo largo de los niños para reducir con ello el contacto directo con el de otros compañeros.

Además, también se recomienda implicar a los propios hijos en esta prevención. Los expertos dicen que conviene enseñar a los niños a evitar el contacto directo de cabeza a cabeza y contarles toda la información sobre cómo se transmiten, por ejemplo, mientras juegan con otros niños. Y recordar siempre que lo más importante es atajar su crecimiento y multiplicación cuando tus hijos empiezan a tenerlos, ya que no podemos asegurarnos completamente que estén expuestos en algún momento de nuevo a ellos.