Adiós al moho de las ventanas en octubre: este método evitará la condensación
Especialmente en tres estancias donde este está más presente.
La llegada del frío y la lluvia hace que las casas se llenen de humedad, más aún si dentro estamos con calefacción. La diferencia de temperatura entre el interior y el exterior, así como la poca ventilación, hace que se generen pequeñas gotas de agua en superficies frías como cristales o paredes motivo de la condensación, provocando moho.
La clave para evitarlo es ventilar las habitaciones y que el aire circule incluso en otoño e invierno, pero también ir retirando esta pequeñas gotas que aparecen en la superficie antes de que formen moho.
Tal y como recogen en la web francesa L'internaute, las estancias más afectadas son las habitaciones, la cocina y el baño y hay que aplicar distintos trucos a cada una de ellas. Por ejemplo, recomiendan en las habitaciones no cambiar drásticamente de temperatura apagando la calefacción por la noche y recomiendan solo bajarla de temperatura. Tampoco se recomienda dejar secar la ropa en estas habitaciones, ya que fomenta la humedad.
Por otro lado, en el citado medio apuntan que la cocina, debido a los vapores de la cocción, el humo y las altas temperaturas es otra estancia caldo de cultivo para la humedad. Para evitar el moho piden usar la campana extractora, tapar las ollas con tapas que retengan el vapor, abrir las ventanas y, siempre que sea posible, mantener la puerta cerrada para evitar que la humedad pase a otras salas de la casa.
En el caso del baño, donde el vapor de agua está más presente dando lugar a molesto moho en el techo y paredes, recomiendan tener una mampara que esté bien sellada y evite que salga el vapor al exterior, así como ventilar si se ha generado mucho vapor tras la ducha abriendo ventanas y puertas.
