5 castillos repletos de historia alrededor de Madrid que debes visitar en tu próximo día de fiesta

España es todo un tesorero de joyas medievales con castillos, murallas y calles empedradas que nos evocan a historias de caballeros, reyes y antiguas civilizaciones. Las fortificaciones, levantadas para proteger las grandes ciudades, son testimonio del ingenio y la destreza arquitectónica de aquellos tiempos. Hoy en día se mantienen en pie gran parte de estas edificaciones, esperando ser visitadas por un público que busca conocer más sobre su historia.

Por suerte para los madrileños, cerca de la capital se encuentran algunos de los castillos más espectaculares y bien conservados del país, siendo muchos de ellos de acceso público. Por ello, hoy te traemos la mejor selección de estas fortificaciones para planificar una escapada en compañía. Se han convertido en el plan favorito de muchos para visitar en días festivos o durante los fines de semana, siendo toda una oportunidad para explorar su origen.

Castillo de Coca

Ubicado en la provincia de Segovia, este castillo es uno de los mejores ejemplos de la arquitectura gótico-mudéjar en España, una mezcla única entre el estilo cristiano y musulmán. Fue construido en el siglo XV por orden del arzobispo Alonso de Fonseca y se levanta sobre un meandro del río Voltoya. Este castillo destaca por su impresionante color rojizo, fruto del ladrillo que abunda, y por tener un espectacular foso que lo rodea.

Flanqueado por cuatro torres, el castillo no solo sirvió como fortaleza militar a lo largo de su historia, sino que también fue una residencia señorial. Hoy en día, se encuentra abierto al público y uno de sus puntos más emblemáticos es la torre del homenaje, a la que se puede acceder subiendo una escalera de caracol. Desde lo alto se pueden observar sus impresionantes patios y jardines.

Castillo de Sigüenza

Esta gran fortaleza de Guadalajara se erige sobre una colina que domina toda la ciudad. Originalmente fue construido como residencia episcopal, pero ahora acoge un Parador Nacional de Turismo y se ha convertido en una de las grandes joyas de nuestro patrimonio. Con sus vistas panorámicas, patios interiores, increíbles jardines y una capilla romántica digna de visitar, este castillo es un símbolo perdurable de la rica historia de la localidad manchega.

Este castillo combina estilos románico, gótico y renacentista debido a las diferentes modificaciones y restauraciones que ha sufrido a lo largo de los siglos. Desde sus muros, se pueden disfrutar vistas espectaculares de Sigüenza y sus alrededores, y su ambiente invita a transportarse a tiempos medievales.

Castillo de Belmonte

Ubicada en la provincia de Cuenca, este es uno de los castillos mejor conservados de Castilla La-Mancha. Construido en la segunda mitad del siglo XV por Juan Pacheco, el primer marqués de Villena, esta fortificación muestra a la perfección la transición del estilo gótico al renacentista. Aunque sufrió daños por parte de las tropas de Napoleón Bonaparte, en el siglo XIX la heredera restauró la fortaleza y le devolvió su esplendor original.

Su planta en forma de estrella de seis puntos le otorga una apariencia peculiar que, junto a sus altos muros, torres y almenas, lo convierten en una fortaleza impresionante. Este castillo ha pasado de ser un palacio señorial a una prisión, incluso ha servido como plató de cine para varias producciones cinematográficas en los últimos años. Además, en la actualidad organiza eventos varios como bailes de época o lucha de justas medieval. 

Castillo de la Alameda

Aunque no es muy conocido, este es uno de los pocos castillos que se encuentran dentro del área metropolitana de Madrid. El castillo de Alameda, también conocido como el castillo de Barajas, fue construido en el siglo XV y está vinculado a la defensa del camino que unía Madrid con Alcalá de Henares. Aunque su estructura sufrió daños en el pasado y llegó a estar en ruinas mucho tiempo, en la actualidad ha sido restaurado y es un sitio de gran interés.

A lo largo de los siglos ha pasado por diferentes manos, siendo residencia de nobles, prisión y hasta un punto de ametralladoras durante la Guerra Civil. Hoy en día el castillo se ha convertido en un palacio renacentista y ofrece visitas guiadas y actividades educativas que permiten a los visitantes conocer más sobre la historia medieval de la región. 

Castillo de la Coracera

Este último se encuentra en San Martín de Valdeiglesias y fue construido en el siglo XV por Álvaro de Luna, valido del rey Juan II. Posteriormente recibió la visita de ilustres figuras como la reina Isabel la Católica cuando fue proclamada heredera de la Corona de Castilla. En este contexto, dicha fortaleza jugó un papel importante en las luchas internas de la nobleza castellana de la época.

Con una planta cuadrada y con torres circulares en sus esquinas, esta edificación es un ejemplo perfecto de fortaleza militar medieval. Además de castillo, este lugar también es sede del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Vinos de Madrid, por lo que también cuenta con una gran vinoteca digna de visitar. También ofrece visitas guiadas y diversos eventos culturales que lo convierten en una excelente opción para una escapada de fin de semana.