5 motivos por los que el Real Madrid estará en la final de Copa
Es cierto que en un Clásico cualquier resultado es posible. Son partidos tan igualados que cualquier mínimo detalle puede decantarlos en uno u otro sentido. Pero no es menos ciertos que, si revisamos los antecedentes más próximos, hay motivos para la esperanza blanca.
Ya está aquí, la vuelta del Clásico copero es una realidad. Tras el 1-1 de la ida, más de uno daba al Real Madrid por derrotado. Pero, aunque no será fácil, hay motivos para la esperanza. Por lo menos, cinco. Repasémoslos.
1. Antecedentes cercanos
Es cierto que en un Clásico cualquier resultado es posible. Son partidos tan igualados que cualquier mínimo detalle puede decantarlos en uno u otro sentido. Pero no es menos ciertos que, si revisamos los antecedentes más próximos, hay motivos para la esperanza blanca.
Desde la llegada de Mourinho al Real Madrid, blancos y culés se han enfrentado en 16 ocasiones. En la mitad de ellas, con el Barça ejerciendo de local (7 en el Camp Nou y una en Mestalla, con motivo de la final de la Copa del Rey). Pues bien, de los ocho resultados cosechados por el Madrid en esos encuentros, sólo 3 significarían la eliminación blanca en caso de repetirse. Cuatro de ellos implicarían el pase directo de los blancos y sólo el 1-1 cosechado en la Champions 2010/2011 conllevaría la prórroga.
Resultados últimas temporadas (Barça local):
07/10/2012, Liga BBVA: Barcelona 2 - 2 Real Madrid (pasaría Real Madrid)
23/08/2012, Supercopa 2012: Barcelona 3 - 2 Real Madrid (pasaría Barcelona)
21/04/2012, Liga BBVA: Barcelona 1 - 2 Real Madrid (pasaría Real Madrid)
25/01/2012, Copa Rey: Barcelona 2 - 2 Real Madrid (pasaría Real Madrid)
17/08/2011, Supercopa: Barcelona 3 - 2 Real Madrid (pasaría Barcelona)
03/05/2011, Champions: Barcelona 1 - 1 Real Madrid (habría prórroga)
20/04/2011, Copa Rey: Barcelona 0 - 1 Real Madrid (pasaría Real Madrid)
29/11/2010, Liga BBVA: Barcelona 5 - 0 Real Madrid (pasaría Barcelona)
2. La fragilidad defensiva del Barça
Después del empate a 1 en la ida, la primera obligación blanca es lograr marcar. Una tarea que se antoja algo más fácil de lo esperado si comprobamos las dificultades defensivas que están experimentando los culés en los últimos tiempos.
En lo que va de temporada, entre Supercopa, Liga, Champions y Copa del Rey, los culés han encajado 46 goles en 41 partidos. O lo que es lo mismo, los azulgrana reciben 1,12 goles por partido disputado.
En contraste, y pese a que los números de esta temporada del Real Madrid están lejos de las estratosféricas cifras del año pasado, los de Mourinho acumulan 98 goles en 41 partidos (2,39 goles por partido). Y lo que es igual de importante: los blancos sólo se han quedado sin marcar en dos de los últimos 16 enfrentamientos directos con el Barça.
3. Kaká como revulsivo
De acuerdo, ya nadie espera al gran Kaká del Milan. Los días de Balón de Oro del brasileño parecen lejanos. Pero al que fuera mejor jugador del mundo tampoco se le ha olvidado jugar. Y llega al momento clave de la temporada blanca en su mejor estado de forma, como demostró en el partido frente al Depor.
Parece que Mourinho apostará por Kaká en alguno de los grandes compromisos blancos de las próximas jornadas. Pese a dejar más sombras que claros en su etapa blanca, el brasileño siempre ha respondido en los Clásicos. ¿Será este el Clásico de Kaká? En el peor de los casos servirá, seguro, para espolear a un Di María que suele brillar ante el Barça. Tampoco está mal.
4. Duelo en las porterías
Salvo sorpresa mayúscula, será Diego López el encargado de defender la portería blanca en el Clásico copero. En el otro extremo del campo, también salvo sorpresa, estará Pinto. Los partidos se deciden en las áreas y la diferencia entre ambos puede ser definitiva.
Desde su llegada al Real Madrid, Diego López ha transmitido tranquilidad y confianza a su zaga. Su sobriedad, incluso en su debut frente al Barça, han devuelto la calma a una línea defensiva que no terminaba de encontrarse cómoda en la imaginaria pugna entre Casillas y Adán. A excepción hecha del gol encajado frente al Depor, las actuaciones del portero gallego han dejado buen sabor de boca. Además, frente al Barça, más que nunca, al Madrid le gusta salir rápido, al espacio que hay tras los adelantados centrales culés. Y en eso, el preciso saque largo de Diego López puede marcar diferencias.
Pinto, por su parte, ha dejado muchas dudas en sus enfrentamientos frente a Cristiano y compañía, No sólo en la su cometido como portero, sino en la labor que tanto exige el juego culé de un cancerbero: la de ser el primer iniciador de juego con el pie. Valdés, cantadas puntuales aparte, se adapta a la perfección a ese rol gracias a su excelente juego con los pies. Sin él, todo es un poquito más difícil.
5. Cristiano: 5 partidos consecutivos marcando en el Camp Nou
Si hay alguien que marca las diferencias en el Real Madrid, esta temporada más incluso que las anteriores, es Cristiano Ronaldo. El astro portugués está en un momento dulce, más tranquilo y confiado que nunca. Desde que comenzó 2013 Ronaldo parece haber olvidado su tristeza y muestra partido tras partido su versión más madura y generosa.
Y esto, pese a aquellos que le acusaban de no aparecer en los partidos grandes, debe preocupar al Barça. Tras no marcar en el partido de ida, Cristiano vio truncado su excepcional registro de Clásicos consecutivos marcando, pero aún tiene a su alcance uno igual de espectacular. Si lograse un gol en el Camp Nou, el portugués se convertiría en el primer jugador en marcar en seis Clásicos consecutivos... ¡como visitante!