De gatos y memes
Un meme puede ser cualquier idea, cualquier fórmula textual o gráfica que se propague por la Red y alcance una difusión notable: ola ke ase es un meme, subtitular la escena del cabreo de Hitler en 'El Hundimiento' es un meme. Su vida es corta y está amenazada por otros memes más novedosos.
Primera pregunta: ¿Qué demonios es un meme? El concepto meme fue formulado por el biólogo Richard Dawkins en 1976 (en su libro El gen egoísta), que lo identificaba con ideas o conductas presentes en una determinada cultura que perviven en el tiempo y que son constantemente reproducidas o imitadas por generaciones sucesivas. Dawkins identificaba estas pequeñas realidades culturales supervivientes con los genes más fuertes y predominantes, los que prevalecen sobre otros más débiles que terminan desapareciendo.
Trasladando esta formulación a internet, un meme puede ser cualquier idea, cualquier fórmula textual o gráfica que se propague por la Red y alcance una difusión notable entre los usuarios: ola ke ase es un meme, subtitular la escena del cabreo de Hitler en El Hundimiento es un meme.
Los memes virtuales no tienen asegurada la misma supervivencia que los memes culturales (tal vez podríamos aceptar que un proverbio o un refrán son memes) o los genéticos en que pensaba Dawkins. Por el contrario, su vida es corta y está amenazada por otros memes más novedosos que no solamente los eclipsan, sino que los vuelven terriblemente demodés en poco tiempo. Hay excepciones: si tomamos los vídeos de gatos haciendo cosas en Youtube o las fotos de comida en Instagram como memes, parece que su vigencia no se agota nunca.
Un meme no es necesariamente una creación intelectual que pueda considerarse una obra, por lo que detectar derechos de autor sobre él va a ser inútil las más de las veces, además de resultar casi imposible localizar a una persona determinada como autora original. En otros casos (como el de El Hundimiento), el meme consiste precisamente en alterar una creación preexistente sin autorización. Sin embargo, hay memes que proceden de obras identificables cuyos autores también lo son, y este sería el caso de Nyan Cat.
Nyan Cat es un gato de 8 bits diseñado por Christopher Torres en 2011. Torres creó un gif animado que representa a un gato cuyo cuerpo es una tartaleta de cereza, que flota por la pantalla dejando tras de sí una estela de colores. Nyam Cat (o Pop-Tart Cat) se extendió por internet a la velocidad del rayo, surgiendo distintas versiones remodeladas por otros usuarios que añadieron sonidos o música a la animación.
Con independencia de que estos añadidos dieran origen a modificaciones de la creación original (transformaciones que, en su caso, hubieran debido ser autorizadas por Torres, que se limitó a tolerarlas), la polémica se ha suscitado en fechas recientes por la inclusión del gato Nyan en un videojuego llamado Scribblenauts Unlimited, desarrollado por 5th Cell y distribuido por Warner. En el videojuego, aparece un gato idéntico a Nyan Cat integrado en la parte gráfica, sin que Torres fuera consultado o autorizara su utilización. En este caso, el meme es también una obra gráfica, y su empleo en un programa de juegos requeriría el permiso de su creador... salvo que se considere que esa utilización es totalmente accesoria y escasamente relevante, amparable en un uso inocuo (fairuse) no perseguible, conforme al Derecho anglosajón.
Al mismo tiempo, en Scribblenauts aparece la recreación gráfica de otro meme, el llamado Keyboard Cat, que procede de un vídeo de Youtube en el que se ve a un gato tocando un teclado con sus patas. En este caso, sin embargo, mi opinión es que la mera representación gráfica de un gato tocando un piano no puede referirse a una obra protegible, ni pretenderse -como tal- infractora de derechos de autor por más que remita a un meme extraordinariamente popular.