Madrid es un carnaval
La capital mostró su lado más multicultural durante el pasacalles del carnaval, en Tetuán; un carnaval único y diferente, con diversidad de personas y tradiciones. Predominó el color. Dominicanos, paraguayos y africanos mostraron vestimentas, danzas y música de sus países de origen. Los españoles llevaron disfraces más burlescos, más castizos.
Madrid se convirtió en un hervidero cultural el sábado, día en que tuvo lugar el pasacalles del carnaval en Tetúan; un carnaval único y diferente, con diversidad de personas y tradiciones, mucho color, y lleno de diversión y celebración.
Los participantes eran un auténtico melting pot: asociaciones de dominicanos, de paraguayos, de africanos, que mostraban vestimentas, danzas y música propias de sus países de origen. También colectivos de españoles que mostraban disfraces más burlescos, más propios del carnaval castizo de todos los años.
El público los jaleaba durante todo el trayecto, laterales llenos de gente tan variada como el desfile. Desbordaba la intensa alegría de familias latinas que vieron desfilar a gente de su país de origen, incluso familiares, con vestimentas tradicionales de su cultura, de un país que echan de menos.
Al día siguiente me escribieron desde Colombia para pedirme unas fotos de una persona concreta que desfiló orgullosamente arropado por sus trajes regionales. Está claro que ha llenado de ilusión otros países ver la participación de sus seres queridos.