23-F Tsunami humano
Hace 32 años se tomaron las calles en toda España. Se mostraba así el rechazo al golpe de estado frustrado. Ahora las tomaremos de nuevo, esta vez para rechazar el golpe de estado financiero consumado. El próximo día 23, muchos indignados volveremos a ocupar las calles, fundidos entre todas las mareas.
Hace 32 años se tomaron las calles en toda España. Se mostraba así el rechazo al golpe de estado frustrado. Ahora las tomaremos de nuevo, esta vez para rechazar el golpe de estado financiero consumado.
El próximo día 23, muchos indignados volveremos a ocupar las calles, fundidos entre todas las mareas, desde la Sanidad más blanca, hasta la negra del carbón. Seremos una marea humana, unida por una sola voz.
Señores del Gobierno, y líderes sindicales: tomaremos la calle, pero no sólo para que no nos sigan robando, mintiendo, manipulando. No sólo por una paga extra o derechos laborales, o por su opacidad y sus engaños.
Muchos de los Indignados los haremos también por conciencia, por dignidad. Por que cada paso suma. Marcharemos por los que se encierran en un hospital, en un aula o en una mina.
Por los que intentan parar un desahucio, por justicia. Para ponerle voz a quien más lo necesita, por humanidad.
Volveremos a tomar la calle para que sea el pueblo quien decida su futuro. Y no un SISTEMA financiero basado en la competencia, en el enfrentamiento y la rivalidad.
Su sistema ha hecho del mundo un negocio, donde gobierna el egoísmo y la codicia. Un sistema donde se especula con los alimentos, donde la guerra es una industria. Un sistema, donde sus únicos valores son los beneficios.
Ustedes forman parte de este sistema. No nos representan.
Sobran razones para las Mareas, para la protesta, la desobediencia. Señores gobernantes, no se trata de ideología, ni de derechas o izquierdas. Se trata de los de arriba y los de abajo, de ustedes y nosotros. Y ya estamos hartos.
No tenemos miedo, sólo estamos creciendo. Sumando conciencias. No cesaremos en tomar plazas, o pasar los "inviernos al SOL".
Acabaremos siendo un Tsunami.
Volveremos a pisar las calles. Hasta dejar Huella.