Papá primerizo motorizado, primera entrega
Aprovechando toda esta locura que conlleva la preparación para la inminente paternidad, a un servidor le toca acoplar muchas cosas del ámbito de la automoción para el nuevo integrante de nuestra familia.
Meas en un palito, y te cambia la vida para siempre. Eso le decía yo a mi chica mientras unos pocos meses atrás tratábamos de asimilar que sí, vamos a ser papás. Por primera vez.
Por más que lo busques, que estés preparándolo, al menos en mi experiencia personal, la sensación de ver dos rayas en un cacho de espuma plástica fue mucho más profunda de lo que esperaba. Tal vez el extra de sorpresa vino porque "nos quedamos a la primera", y eso nos restó algo de tiempo de preparación y expectación mental. De repente un montón de nuevas dudas te asaltan: ¿tengo que cambiarme de piso? ¿tengo que cambiar de coche? ¿mantendré el trabajo y el nivel de ingresos para poder mantener al peque? Puede que ya lo tuvieras todo más o menos pensado o calculado (al menos yo llevaba muchas cosas ya en la cabeza cuando nos pusimos "a la tarea"), pero una cosa es pensar y calcular, y otra es empezar a meterse en todos estos gastos.
Porque puede que el bebé venga con un pan debajo del brazo, pero también viene con un montón de gastos asociados, que te hacen cambiar el orden de tus prioridades económicas a uno distinto, donde, por delante de cualquier adquisición están las dedicadas al pequeño de la casa.
El Fulvia tendrá que esperar
Como loco de los coches, os estaba preparando una serie de especiales a colación de un artículo de opinión extremadamente exitoso que publiqué hace ya un buen puñado de meses, bajo el título de "haz de tu coche tu sueño húmedo".
Tenía elegido ya el proyecto de restauración, un genial Fulvia de Lancia, el de la imagen de aquí arriba, que iba a pasar por un proceso de restomod completo hasta convertirse en mi joyita de uso diario, pero también de rallyes clásicos.
Ahora este proyecto se tendrá que quedar "on hold", ya que los recursos financieros y el (poco) tiempo libre van a ir dedicados al peque de la casa, que viene para el mes de marzo, poco después del próximo Salón de Ginebra.
Por cierto, antes de seguir adelante, tranquilos, amigos míos, el Fulvia volverá en forma de proyecto, porque va a quedarse guardado donde está a la espera de que me lo pueda traer al garaje de casa, gracias a sus amables propietarios actuales, que son unos muy buenos amigos míos.
Pistón también necesitará su espacio vital en el nuevo coche
Pero volvamos al meollo del asunto. Aprovechando toda esta locura que conlleva la preparación para la inminente paternidad, a un servidor le toca acoplar muchas cosas del ámbito de la automoción para el nuevo integrante de nuestra familia de dos más uno (mi perro Pistón es ese más uno).
Y dándole vueltas al tema, ¿por qué no hacer una pequeña guía para todos aquellos que estáis pasando o vais a pasar por una situación similar?
No, en uno de esos no cabe la familia entera
Lo que os vamos a ir publicando, semana a semana, es un especial dedicado a todos los aspectos que cruzan el mundo del motor con el de la paternidad (y maternidad). Desde la elección adecuada del coche perfecto (que os voy a ejemplificar con una macro-comparativa que acabará con la selección del nuevo "familiar" para esta casa), hasta el análisis de sillitas infantiles, accesorios para cinturones de seguridad de embarazadas, anclajes isofix, sistemas de infoentretenimiento y un larguísimo etcétera, coronado con una nueva prueba de larga duración del coche que nos quedemos por aquí para movernos.
No, no supondrá esto la jubilación o el relevo del Abarth de larga duración (del que os tengo pendientes de publicar dos artículos en los próximos días), sino un complemento, con el afán de que os sirva de ayuda en la mayor medida de lo posible.
Una aventura que arrancará con aproximadamente 20 entregas, una a la semana, y que dispararemos la semana que viene con la fijación de parámetros para elegir nuestro coche "ideal", segmentando precio, tamaño y opciones que queremos y buscamos en él, antes de empezar a probar, uno a uno, cada uno de los candidatos, y pasarnos por los concesionarios "de incógnito" para sacar presupuestos y opciones de compra.
¿Os motiva la idea?