Un audaz ataque deja tiritando a Rusia con sus cazas en una zona clave
Ha atacado una base en la que reposaban varios aviones muy importantes para los rusos.
Ucrania continúa propiciando audaces y duros ataques contra Rusia para interrumpir sus operaciones militares. El último ha sido el cometido contra la base aérea de Marinovka, en la región rusa de Vologda, según informa Tech.
Al principio, Marinovka guardaba los aviones de reconocimiento Su-24MR, pero la guerra hizo que se trasladaran más maquinas, tal y como confirmaron las fotografías de satélite publicadas el pasado 19 de agosto. En ellas podía verse la presencia de 14 bombarderos tácticos Su-35 y 15 su-35 en esta base.
Al igual que en otros ataques, las tropas ucranianas usaron varias decenas de drones. De hecho, los rusos aseguraban haber derribado 28 drones. Unos esfuerzos que no fueron suficiente, ya que los drones que lograron atravesar la línea de defensa provocaron un incendio en el aeropuerto y provocaron explosiones secundarias, probablemente generadas por la detonación de depósitos de municiones.
Graves pérdidas
Si bien se desconoce el alcance de los daños causados por el ataque ucraniano, es complicado evacuar casi 30 aviones, por lo que se estima que algunos quedaron destruidos, como ocurrió en anteriores ataques a otras bases rusas como Morozovsk.
Y es que el Su-34 y el Su-35, derivados del caza de superioridad aérea Su-27 de la era soviética, son de los aviones más avanzados de Rusia. El Su-34 posee una capacidad de carga útil de hasta 14 toneladas y está diseñado para ataques terrestres, mientras que el Su-35 se destaca en el combate aire-aire con su poderoso radar N035 Irbis-E.
Desde que comenzó el conflicto en Ucrania, Rusia ha perdido al menos 32 Su-34 y siete Su-35. Unas pérdidas que pueden resultar decisivas en el devenir de la guerra.
